Palma: condenados por intentar vender una vivienda que era ilegalizable |
(Diario de Mallorca, 11/03/2021)
La casa se levantó en un terreno rústico y la infracción urbanística ya había prescrito
J.F. Mestre. Los propietarios de una vivienda levantada en un solar rústico han sido condenados por una jueza de Palma, por intentar vender esta casa que es ilegalizable y sin haber facilitado a los compradores toda la información urbanística sobre la propiedad. Esta demanda ha sido ejercida por una pareja que se interesó por la compra de una casa en Son Ferriol, donde iban a instalar su vivienda familiar. La propiedad la encontraron a través de una inmobiliaria. Les gustó la vivienda, que era una casa aislada con piscina, y realizaron una oferta de compra por valor de 355.000 euros. La oferta fue aceptada y los compradores entregaron una paga y señal, mientras tramitaban el préstamo hipotecario, de 11.500 euros. En el contrato de arras se establecían las características de la vivienda, que estaba situada sobre un terreno rústico. Y se añadió un documento del registro de la propiedad, otros documentos municipales y un certificado que indicaba que sobre la casa no existían infracciones urbanísticas. Es decir, certificaban que la vivienda era legal, pese a que se construyó en un solar rústico.Los propietarios tendrán que devolver el pago adelantado que recibieron de los compradores
Fue el asesor económico el que informó a los compradores que existían problemas para obtener una financiación. El banco planteaba problemas porque se trataba de un inmueble que estaba fuera de ordenación y, por tanto, no podrían obtener la célula de habitabilidad. Esta información fue más tarde confirmada por un abogado experto en urbanismo, que explicó que se trataba de una construcción ilegal y, además ilegalizable. Era una casa que se construyó sin permiso, si bien la infracción urbanística ya había prescrito, por lo que no se podía derribar. Sin embargo, los nuevos propietarios no podían realizar ningún tipo de obra, ya que habría sido ilegal y podrían sufrir un expediente de infracción urbanística. Los compradores se sintieron engañados por los vendedores, a los que reclamaron la devolución de los 11.500 euros que habían entregado. A través del abogado Miguel Forteza Rey pidieron que se devolviera el dinero entregado por adelantado, pero los compradores se negaron a ello. Desviaron la responsabilidad hacia la agencia inmobiliaria, por no haber facilitado a los clientes la información sobre la situación urbanística de esta vivienda de Son Ferriol.
La demanda ha sido aceptada y se condena a los dueños de esta finca rústica a devolver el dinero adelantado que recibieron de los compradores, más intereses y costas. La magistrada cuestiona que no se les facilitó toda la información precisa a los interesados y descarga la responsabilidad hacia los propietarios de la casa, y no hacia la agencia inmobiliaria. Señala la sentencia que los compradores confiaron en los documentos que se les entregó, pero no se les puede exigir que tuvieran un conocimiento urbanístico sobre la calificación urbanística de la finca y, sobre todo, de sus consecuencias.