(Diario de Ibiza, 9/08/2019)

Los propietarios denuncian que la parcela colindante de la denunciante tiene un muro que también impide el paso

Eugenio Rodriguez. Los propietarios con la orden de derribo de las paredes que cortan el tramo final de la calle Sageta, en la zona de Can Fita (Sant Josep), ya han culminado la demolición de las estructuras. El juzgado de lo Contencioso número 3 de Palma había requerido al Ayuntamiento a que ejecutara la demolición forzosa de las vallas y cerramientos que invaden la vía pública e impuso una sanción al primer teniente de alcalde, Ángel Luis Guerrero, de 150 euros por incumplir la sentencia, firme desde 2017, que obligaba a echar abajo dos garajes ilegales. Las dos construcciones se eliminaron pero quedaron en pie las paredes, lo que provocó la intervención del juez para advertir al Consistorio de que la sentencia aún no se podía dar por ejecutada.

El Ayuntamiento había anunciado a los propietarios que el jueves se iba a personar una empresa de construcción para ejecutar el derribo, pero estos optaron por hacerlo antes por su cuenta.

Este proceso se abrió a raíz de la denuncia que presentó la propiedad de la finca colindante porque los dos garajes ocupaban la vía pública y cortaban el acceso a su finca. Tras la demolición de los muros, los vecinos afectados advierten de que ha quedado al descubierto que la finca de la denunciante cuenta con una pared de piedra, de menos de un metro, que corta el paso desde la calle Sageta (el nuevo tramo abierto). Insisten en que la vecina puede acceder a su propiedad a través de la calle Cabussó.