(Menorca, 23/11/2017)

La sanción es de al menos 600 euros al mes y si no la quita se puede prolongar durante un año

Jordi González. El Consorcio para la Protección de la Legalidad Urbanística en Suelo Rústico de Menorca ha impuesto una primera multa coercitiva a la propiedad de Binimoti, por la barrera metálica en rústico, instalada sin permiso, y que corta el Camí d’en Kane, en la zona que linda con el Camí dels Alocs.

Sobre la propiedad pesa un expediente de disciplina abierto ya desde hace tiempo, que le obliga a restituir la legalidad. Ello implica la retirada de la barrera metálica (ya que en suelo rústico están prohibidas), y en todo caso la puede sustituir por una de acebuche, explica la asociación de los Amics del Camí d’en Kane.

El Consorcio desde hace unos meses ha empezado a imponer este tipo de multas coercitivas a los propietarios infractores. Son sanciones mensuales que corresponden al 10 por ciento del valor de las obras de demolición, que pueden imponerse hasta que se cumpla la orden, con un máximo de doce mensualidades, es decir con una penalización del 120 por ciento.