Palma: el promotor del Casino Teatro Balear niega el acceso a los celadores de obras de Cort |
(Diario de Mallorca, 4/03/2015)
Agentes de la Patrulla Verde de la Policía Local y funcionarios del departamento de Disciplina informaron por tercer día al juzgado sobre el presunto quebrantamiento del precinto
JOSEP CAPÓ PALMA. Nuevo capítulo en el pulso que mantienen los promotores del Gran Casino Teatro Balear con el Ayuntamiento de Palma. Ayer el gerente de la empresa, José Antonio Fernández, negó el acceso a los celadores de obras del Ayuntamiento quienes, por tercera vez desde el pasado viernes, no han podido entrar en las instalaciones para comprobar si se ha quebrantado la orden de precinto y si se han reanudado las obras, paralizadas el pasado día 19 de enero, por carecer de permiso municipal. De esta forma, los promotores de la infraestructura de juego suman tres posibles delitos de obstrucción y desobediencia.
A las once de la mañana de ayer agentes de la Patrulla Verde de la Policía Local y funcionarios del Departamento de Disciplina Urbanística del Ayuntamiento de Palma se personaron en el Gran Casino Teatro Balear. Para esta hora estaban citados el gerente de la empresa promotora de las obras, José Antonio Fernández, y el arquitecto Juan González de Chávez. El técnico anunció a los funcionarios municipales que había presentado su renuncia a la dirección de obras –cabe recordar que carecen de licencia–, mientras que el gerente se negó a que la comisión municipal accediera a las instalaciones.
Los funcionarios levantaron acta de esta nueva actitud obstruccionista por parte de la empres a y pusieron nuevamente los hechos en conocimiento del juzgado de guardia, recabando de la administración de justicia una orden inmediata de entrada.
El teniente de alcalde de Urbanismo de Cort, Jesús Valls, hizo un llamamiento ayer a los promotores con el fin de que la empresa cese en su actitud obstruccionista y colabore con la Administración.
Los celadores municipales quieren acceder a las instalaciones con el fin de comprobar si, tal como ha denunciado la competencia, se ha quebrantado la orden de precinto y se han reanudado las obras. Cuando puedan entrar al interior del Teatro Balear comprobarán el estado de las obras con el acta levantada cuando, a finales del pasado mes de enero, se procedió a paralizar los trabajos que se estaban realizando sin permiso y a precintar el local.
La orden de precinto, al margen de las pegatinas que se colocan, implica que nadie puede acceder al interior del establecimiento a no ser que cuente con un permiso expreso. Por ello, se considera irrelevante la polémica sobre si se han quitado o no las pegatinas de la puerta principal o de las laterales. Lo cierto es que cuando los celadores municipales acudieron el pasado viernes a inspeccionar el inmueble, tras la denuncia efectuada por Casino Playa de Palma S. A., comprobaron "ruidos compatibles con la realización de obras" procedentes del interior del local. También pudieron observar "sombras que se movían", y que la luz eléctrica estaba encendida.
Tanto los ruidos, como las sombras y la luz cesaron tras las llamadas de los funcionarios municipales. Tras no obtener respuesta por parte de los promotores para poder entrar pusieron en conocimiento los hechos del juzgado de guardia.
La misma situación se repitió el pasado lunes por la mañana, después de que, según fuentes municipales, se constatara que no hubo actividad el sábado y domingo. Ayer tanto el gerente como el arquitecto habían sido citados expresamente.
El Ayuntamiento reitera que no puede dar la licencia de activividad
El teniente de alcalde de Urbanismo del Ayuntamiento de Palma, Jesús Valls, reiteró ayer que Cort "no puede conceder la licencia de obras y actividad al Gran Casino Teatro Balear al incumplir el proyecto presentado por los promotores la legalidad vigente emanada de la ordenanza de usos del Centro Histórico".
El teniente de alcalde aseguró que los promotores conocen la ordenanza, incorporada al planeamiento urbanístico, que establece que "no se puede instalar una nueva actividad de casino con una superficie superior a los 300 metros cuadrados, cuando el proyecto presentado tiene una superficie solo de acceso público de 1.400 metros cuadrados,además de no cumplir con otros preceptos". Calificó de "temeraria" la actitud de los promotores de la nueva sala de juegos y puso de manifiesto la "perplejidad" que produce en el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Palma las actuaciones protagonizadas por la empresa. Recordó que han puesto una querella contra todos los integrantes de la gerencia de Urbanismo, que solo ha sido aceptada a trámite para el caso del gerente Fernando González y, por ello, este funcionario ha sido apartado de la tramitación de este expediente.
Por lo demás, el teniente de alcalde afirmó que "existe unanimidad política y administrativa en el sentido de que no se puede conceder la licencia por incumplir el ordenamiento urbanístico vigente".