(Diario de Mallorca, 4/02/2014)

Entre sus principales objetivos está la aprobación del PGOU y resolver los expedientes atrasados

S. Sansó. El ayuntamiento de Manacor aprobó ayer en pleno la creación de una Ponencia de Ordenación Urbanística, para intentar resolver los principales problemas endémicos del área: la consecución del Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU), la resolución de los expedientes de demolición y disciplina, y la gestión de servicios de una serie de polígonos pendientes de desarrollo.

Todos los partidos votaron a favor del órgano donde cada uno de ellos estará representado y que, en principio, prevé reuniones mensuales: "aunque después de la redacción del documento base eso se puede ir intensificando" señalaba el alcalde Antoni Pastor. Su delegada del Urbanismo y teniente de alcalde, Catalina Riera, era la encargada de explicar, a grandes rasgos, las funciones de la nueva ponencia: "se trata de que entre todos los grupos municipales podamos llegar a acuerdos y soluciones, aceptando sugerencias y propuestas".

Se quiere que la ponencia, que contará siempre con el asesoramiento de los técnicos y arquitectos municipales, pueda acelerar y encaminar de una vez el PGOU, pendiente desde hace tres décadas y el escollo número uno de cara a consolidar las bases de la ordenación durante los próximos años. Un plan general, que según la propia Riera, podría estar listo antes de que acabe la legislatura, en primavera de 2015.

El otro gran olvido histórico de la corporación ha sido la resolución a tiempo de los expediente de disciplina urbanística, y las órdenes de demolición derivadas de algunas de ellas. Durante la pasada legislatura, el entonces concejal de Urbanismo, Bernat Amer, ya intentó que algunas de ellas se llevaran a aprobación del pleno, sin éxito. Cabe también recordar que a mediados de 2013, el Ayuntamiento admitió tener 1.085 expedientes de disciplina sin cerrar, de un total de 1.213 infracciones instruidas en los últimos ocho años. O sea, solo 128 resueltos de una u otra forma: solamente el 10% del total.

Las reacciones

Para la oposición, esta nueva fórmula ha despertado sensaciones a medio camino entre la esperanza y la desconfianza: "No es que haya una confianza absoluta después de tantos años, pero no molesta. Quisiera creer que no va a ralentizar aún más el urbanismo local", señala Joan Llodrà, regidor de Esquerra. Para Sebastià Gaià (PSM), la noticia es positiva aunque espera "que sea vaya mejor que la ponencia de caminos, que tan solo se dedica a resolver temas de particulares y no para el bien público". Para la socialista Amanda Fernández, "puede que la ambición de querer abarcar demasiado, diluya sus funciones".

Finalmente la concejal de Urbanismo, Catalina Riera, descartó que la Ponencia de Ordenación Urbanística vaya a abrirse también a las sugerencias de entidades fuera del ámbito político o técnico, que "tendrán otros espacios para ello".