Manacor: el Ayuntamiento da por finiquitada la demolición del puente del Riuet |
(Diario de Mallorca, 22/01/2013)
Comunica al juez que ha hecho ya efectivos los últimos pagos y ha restituido completamente la zona
T. Obrador/S. Sansó. El ayuntamiento de Manacor ha dado por concluido al fin el proceso de demolición del controvertido puente del Riuet de Porto Cristo, y la consiguiente restitución de la zona aledaña, tal y como estaba antes de la construcción de la infraestructura, entre 2003 y 2004. Así lo ha confirmado el concejal local de Medio Ambiente, Bernat Amer (AIPC). De hecho en el último pleno municipal, ya se informó del pago postrero que completa todos los trámites del proyecto.
Consultado por este diario, Amer detalló todos los costes de las obras para demoler el puente y hacer que la zona quede lo más parecida posible a como estaba antes de comenzar el paso entre ambos lados de Porto Cristo. Cabe recordar que su derribo fue derivado de las demandas de una serie de vecinos, que se vieron afectados por la proximidad del puente a sus viviendas y la devaluación de los inmuebles, y de la posterior sentencia que hace unos años dictó el Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB).
A las arcas del consistorio manacorí, el caso finalmente le ha supuesto el desembolso de 759.000 euros. Como ya en su día la infraestructura fue pagada (1,1 millones) a partes iguales por consistorio, Consell de Mallorca y Govern Balear, ahora la corporación confía en el compromiso de ambas instituciones supramunicipales para también hacer frente a los gastos de demolición.
En cuanto a los costes de obra para tirarlo abajo, hay que decir que han quedado divididos en cuatro proyectos: el de demolición, desvío de servicios, un enlace eléctrico entre las estaciones transformadoras para no dejar sin suministro a ninguno de los dos lados del puente, y el denominado de demolición de los elementos de sostén y cimentación no ejecutados. Así como los honorarios de los técnicos que han redactado y dirigido las obras.
Desglosado
A fecha de 15 de enero de 2014, los costes de las obras, según las certificaciones aprobadas, asciende a un total de a 655.829 euros. En concreto, la de demolición del puente ascendió a 307.629 euros; el desvío de servicios, 155.760 euros, a lo que hay que sumar 1.120 euros de certificación final; el nuevo enlace eléctrico, 49.746, más 4.839 euros de sobre coste; y por último, echar abajo el resto de elementos ha costado 136.732 euros.
Los honorarios adjudicados correspondientes a las asistencias técnicas de redacción y dirección de los proyectos, ascendió a 104.317 euros de los cuales, en este caso. Se aprobaron 103.366. Las cuentas aprobadas para la redacción del proyecto de demolición fueron de 26.750 euros; el desvío 5.600 euros y el nuevo enlace 6.217. La demolición de elementos nos construidos: 4.720 euros.
Mientras que los emolumentos aprobados por la dirección de obras en cuanto a personal responsable, fueron de 21.117 euros para el técnico superior y 15.838 del técnico medio. La coordinación de seguridad costó 10.101 euros; el desvío de servicios 5.600; el nuevo enlace 2.391 y la demolición de elementos no ejecutados 5.030 euros (con 1.257 euros de honorarios pendientes).
Recordar que el puente elevado se abrió al tráfico en 2004 tras una inversión de más de 1,1 millones de euros y una construcción polémica a cargo de Melchor Mascaró. Pronto los vecinos alertaron del excesivo acercamiento del puente a sus viviendo, lo que hizo que alguno de ellos incluso no pudiera abrir la ventana.
El puente elevado del Riuet comenzó a desmontarse en noviembre de 2011, solo ocho años después de que fuera erigido como un paso imprescindible que substituyera al viejo puente en superficie, hoy todavía en pie. Entre las empresas contratadas para las diferentes fases estuvieron la mallorquinas Germans Gost o Electrohidraulica y la navarra Erri-Berri, que se encargó de la tarea de demolición propiamente dicha.
Volviendo a las posibles ayudas externas, señalar que el 2012 Pastor obtuvo el compromiso verbal tanto de, Govern como del Consell, que fijaron una cantidad máxima de 330.000 euros cada una, cifra que ahora tendrá que reducirse puesto que el coste no ha llegado al millón de euros previsto.
De los miradores a las zapatas eliminadas
S. Sansó, Porto Cristo. Aunque supuestamente pareciera que la demolición iba a ser fácil y temporalmente razonable, no ha terminado de ser así. Cierto es que solo bastaron unos meses para que la obra que costó 1,1 millones quedara reducida a escombros. Tan cierto como que después los trámites se han ido alargando. Primero el Ayuntamiento dejó sendo miradores a ambos lados de lo que fuera la obra. Pero los vecinos volvieron a reclamar que atentaban contra su intimidad, al ser transitables hasta al lado de sus ventanas. También se demolieron. Después vino el tema de las zapatas, las bases de hormigón que sustentaban el puente y que en un principio el consistorio pensó conservar. El TSJB obligó a que ambas cosas desaparecieran del paisaje.