(Diario de Ibiza, 9/11/2013)

El Ayuntamiento elude cualquier relación con el delito y asegura que ayudó a destapar el asunto

j. ll. ferrer | ibiza. El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Sant Antoni emitió ayer un comunicado en el que confirma que ha abierto expediente disciplinario al aparejador municipal, Miguel Ángel Martí Miralles, condenado por la Audiencia Provincial a un año y medio de prisión y también a ocho años y medio de inhabilitación para el cargo como autor de un delito continuado de prevaricación urbanística. Miralles informó a favor de una licencia de obras a sabiendas de que era ilegal.

El comunicado del equipo de gobierno, emitido a última hora de la tarde de ayer, se limita dejar constancia de que el Ayuntamiento «no era parte en el procedimiento» y que la sentencia no es aún firme, puesto que el aparejador tiene cinco días para recurrir ante el Tribunal Supremo.

Aparte de ello, la nota afirma que «los servicios jurídicos están estudiando las consecuencias que el contenido de esta resolución judicial pudiera tener sobre el régimen disciplinario del funcionario en cuestión». «Por ello, el Ayuntamiento está iniciando el expediente disciplinario correspondiente», añade el equipo de gobierno.

En un intento por distanciarse del aparejador ahora condenado y tratando de demostrar que la Corporación actuó correctamente, el Ayuntamiento destaca el hecho de que en 2008 y ante la magnitud de las obras, la Junta de Gobierno acordó enviar el expediente de esta licencia al Consell de Ibiza para que la Comisión Insular de Urbanismo y Patrimonio emitiera informe vinculante, a pesar de que el aparejador no lo había considerado necesario previamente. También la concejalía de Urbanismo envió al celador a la obra y emitió informe desfavorable para la construcción que se pretendía, aunque finalmente se ejecutó en su mayor parte.

Según afirma el Ayuntamiento, el informe solicitado al Consell «dio lugar a posteriori a la investigación de la Fiscalía».

El PSOE pide dimisiones

La Corporación aprovecha para criticar al grupo del PSOE-Pacte, que pocas horas antes había emitido una nota en la que pedía «dimisiones» en el equipo de gobierno «ante la corrupción urbanística que sufre el municipio».

El portavoz de los progresistas, Pep Marí, pidió que «empiecen las dimisiones de manera inmediata». «Más de uno en el PP se debería ir a casa hoy mismo», añadió.

El PSOE-Pacte pedirá una auditoría externa de todos los expedientes firmados por Martí Miralles durante los últimos cinco años.

El PP acusó a la oposición de tratar de sacar «rédito político» y afirmó que el PSOE-Pacte realizó sus críticas sin haber leído aún la sentencia condenatoria.