Sant Antoni: piden 8 meses a Cretu por una obra ilegal en Ibiza |
(Diario de Mallorca, 12/10/2013)
El artista de origen rumano será juzgado en la Audiencia por construir un chalé en zona protegida
J.F.Mestre. Palma. Michael Cretu, el popular músico de origen rumano, será juzgado la próxima semana en la Audiencia de Palma, acusado de un delito contra la ordenación del territorio. El artista, que también es productor musical, se construyó una casa en una montaña de Eivissa, sobre un terreno natural. Aunque consiguió una autorización municipal para levantar esta casa, la vivienda, donde construyó su estudio musical, no respetó las dimensiones del permiso. Tras varios años de pleitos judiciales, finalmente el Ayuntamiento de Sant Antoni, localidad donde se construyó el inmueble, tuvo que proceder a su demolición.
Un tribunal de la Audiencia de Palma juzgará el próximo miércoles este caso. Además del músico, la fiscalía acusa al exalcalde de Sant Antoni, Antonio Marí Tur; a la exconcejal de Urbanismo, Blanca Castiella Rodríguez; al técnico municipal, Miguel Ángel Martí Miralles, y al arquitecto José Torres Torres. El fiscal acusa de prevaricación urbanística, falsedad cometida por un funcionario público y un delito contra la ordenación del territorio. Para el músico se reclaman ocho meses de cárcel por este último delito.
El escrito de acusación explica que en el año 1997 el alcalde de este municipio de Eivissa y la responsable del área de Urbanismo impulsaron la aprobación de la licencia de obras. Pese a que se trataba de un terreno protegido, el Ayuntamiento aprobó la construcción de una vivienda con dos piscinas. La construcción podía tener una superficie de 864 metros cuadrados para la vivienda y otros 67 para las piscinas. El proyecto se realizaba en la finca de Can Guillem y se situaba en la cúspide de una montaña de Eivissa. Las obras se iniciaron en el año 1997 y debían desarrollarse durante tres años. Sin embargo, el Ayuntamiento ibicenco aprobó después una prórroga de las obras.
El terreno donde se construyó la casa era propiedad de una empresa propiedad del cantante de origen rumano, que contrató al arquitecto que se encargaría de proyectar las obras. En vez de respetar la dimensión que marcaba la licencia municipal, según sostiene la fiscalía, se construyó una casa mucho más grande. Se levantaron casi 2.000 metros cuadrados más de lo que inicialmente estaba previsto.
Tanto el arquitecto como el promotor de la obra conocían, según la acusación, que se trataba de un solar protegido.
A pesar de las dudas iniciales que planteó el técnico municipal sobre las excesivas dimensiones de la casa, finalmente este funcionario certificó que la vivienda cumplía con la licencia municipal.
Una vez descubierta la irregularidad urbanística, se inició un pleito judicial, que estableció la ilegalidad de la vivienda. Esta decisión del juez fue después ratificada por un tribunal, que también impidió las maniobras que se realizaron para intentar legalizar la construcción. Finalmente, el Ayuntamiento se encargó de pagar el derribo de la espectacular vivienda de Eivissa.
Un artista que triunfó en la música en Alemania en los 80
Aunque en España no es una voz conocida, Michael Cretu es uno de los artistas musicales más populares de Alemania. Durante el final de los años 70 y en la década de los 80 vendió miles de discos por sus canciones como solista.
Cretu ha compaginado su carrera profesional como cantante y la de productor. Actuó durante años como teclista en varios grupos, hasta que dio el salto a la popularidad como artista en solitario.
Entre sus proyectos como productos musical destaca la edición del álbum que Mike Oldfield publicó en el año 1987. También ha sido el autor de la letra y música que han interpretado varios grupos musicales de Alemania.
Estuvo casado también con una conocida cantante, Sandra Ann, que llegó a encabezar con una de sus canciones la lista de discos más vendidos en 21 países.
Michael Cretu tenía centralizada toda su producción musical en su espectacular casa de Eivissa, que tuvo que ser demolida.