Campos: trece derribos para la historia |
(Diario de Mallorca, 20/01/2013)
Si en los últimos años han provocado gran polémica las demoliciones de los chalés ilegales de Llucalcari y del Pont del Riuet de Porto Cristo, este 2013 el protagonismo recae en la famosa urbanización de la costa de Campos paralizada a mediados de la década de los noventa
T. Obrador. Campos / Ses Covetes. No debe quedar rastro de la urbanización de ses Covetes antes del próximo verano, concretamente antes del 15 de mayo. El Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB) ya tiene conocimiento del proyecto de demolición (elaborado por el Govern y aprobado por la junta de gobierno del ayuntamiento de Campos) y como máximo el 15 de marzo han de haberse iniciado las obras de derribo. El proyecto en cuestión detalla el proceso a seguir de cara a eliminar un total de trece bloques que suman un total de 68 apartamentos. Trece bloques que serán tirados abajo y pasarán, como los chalés ilegales de Llucalcari (Deià) y el Pont del Riuet de Porto Cristo (Manacor), a la historia. Para muchos una victoria de los defensores del medio ambiente y del respeto a la Ley (en este caso protección de los 100 metros de servitud marítima pública) y de rechazo a la especulación y depredación urbanística. Para otros, en contraste, un sinsentido judicial que perjudica el crecimiento económico.
En cualquier caso, teniendo la razón los partidarios de la demolición o los que apoyan que la licencia municipal se concedió bien y debería poder existir la urbanización, la realidad es que el TSJB ha fijado un estricto calendario que, en su primera etapa, el consistorio dirigido por el alcalde Sebastià Sagreras (PP) está cumpliendo. En estos momentos se trabaja en la confección del pliego de condiciones para adjudicar las obras, cuyo presupuesto se prevé no exceda de un millón de euros. Numerosas empresas ya han mostrado interés por responsabilizarse. Y en cuanto a la promotora de la urbanización (figuran varios empresarios entre ellos el padre del alcalde), guarda silencio. "No hay novedades ni nada que decir", indicaron ayer a este periódico.
La cronología de todo este asunto de ses Covetes se remonta a la década de los noventa del pasado siglo. En 1992 la promotora alemana Marina Ernst SL solicitó y obtuvo la licencia de obras municipal para edificar un conjunto de trece bloques de viviendas, piscina y bar-restaurante. Las obras comenzaron en 1994. El GOB, dirigido entonces por Miquel Àngel March, el PSM y particulares llevaron el caso ante la Justicia, que vio indicios de la ilegalidad en el complejo y ordenó en 1995 la paralización de los trabajos.
El proceso judicial sumó numerosos capítulos y hace pocos días el TSJB rechazó los dos últimos recursos presentados por el ayuntamiento y la promotora.
Los pasos a seguir
El proyecto de demolición del conjunto residencial de ses Covetes elaborado por la dirección general de Arquitectura y Vivienda del Govern y presentado al TSJB, contempla la combinación de demoliciones manuales y con maquinaria especializada, "machacadora-trituradora".
Respecto a los trabajos previos se comenzará por el vallado del perímetro del complejo. Se instalarán casetas de vestuarios, unidad de inodoro químico, zona de aparcamiento de maquinaria, área de taller de maquinaria y zona de acopio de escombros para su posterior carga y transporte.
"En los edificios que tienen el cerramiento de fachada completamente ejecutado, se desmontará manualmente primero el tabique interior del citado cerramiento de bloque hueco de hormigón de 5 cms. para desmontar el aislamiento térmico de poliestireno expandido y acopiarlo aparte. Seguidamente se desmontarán los cercos de madera, después la tabiquería interior de bloque y ladrillo hueco", según refleja la documentación facilitada al juez.
En el edificio más próximo a la playa de ses Covetes-es Trenc, destinado a restaurante, "aparte del proceso descrito se desmontará también el pavimento de gres y los alicatados de la planta baja".
El material de la demolición "se irá acopiando en las zonas previstas, separando hormigones, armaduras de acero (fracciones grandes), ladrillo, tejas, poliestireno expandido, baldosa cerámica... para su carga sobre camión y posterior traslado a MAC Insular".
Las áreas de material existente, procedente de la excavación inicial de la obra de la urbanización, que se componen principalmente de fragmentos de marés y tierra vegetal, "se utilizarán para el relleno en la adecuación morfológica ya que se trata del material original del lugar". Según MAC Insular, la cantidad de residuos a gestionar en instalaciones autorizadas asciende a 11.189,35 toneladas. La valoración del coste de gestión: 43,35 euros por tonelada. La estimación completa de residuos en la obra es de 7.531 m3. Para la restitución de los terrenos (superficie total construida de 8.561 m2) se plantea el relleno de los huecos con rocas, piedras o ecograva.
En 2007 la promotora de ses Covetes anunció que exigiría una indemnización mínima de 54 millones de euros. "Esta cantidad es un regalo ya que teniendo en cuenta diferentes aspectos, como el actual precio del mercado, la cifra debería superar los 60", afirmó. En 2010 redujo la cantidad presentando un escrito al consistorio pidiendo 27,3 millones, que luego no justificó dentro de plazo.