Ferreries: el GOB denunció la apertura del vial en la ANEI de Santa Àgueda |
(Menorca, 4/11/2011)
La carretera fue autorizada mediante decreto del alcalde de Ferreries, en noviembre de 2010, solo para las obras y con la condición de restituir el terreno tras su finalización
L.B., Ciutadella. El GOB denunció ante el Consorcio insular de Disciplina en Rústico la apertura de un vial en la montaña de Santa Àgueda, incluida en la ANEI 17, y cuyo promotor era el Consell.
Los ecologistas presentaron la denuncia el 22 de febrero de este año y alertaban de la construcción de un camino “con importante intervención de transformación del territorio con maquinaria pesada (desbroce de vegetación, vertido de materiales y excavación de taludes, entre otros)”, con la petición de que el Consorcio investigara la legalidad de las actuaciones denunciadas.
Poco después, el 16 de marzo, el presidente del Consorcio respondía a los ecologistas y les informaba que mediante decreto de alcaldía del Ayuntamiento de Ferreries, con fecha del 26 de noviembre de 2010, se autorizó la adecuación del camino de acceso al recinto central del Castell de Santa Àgueda, relacionado con el proyecto de rehabilitación de la torre número 10, un tramo de la muralla y la reparación del tejado de la antigua capilla dedicada a Santa Àgueda.
En el escrito, se detallaba que “las actuaciones se autorizan provisionalmente, durante el transcurso de las obras a fin de permitir el acceso de maquinaria al recinto para su mantenimiento y restauración. Una vez finalizadas las obras, se deberá restituir el camino a su estado original”.
Miquel Camps, portavoz del GOB, afirma que “querer utilizar ahora este vial para uso público es una trampa. Se nos dijo que el camino se abrió de forma excepcional para las obras, aprovechando un paso agrario, por lo que no se puede consolidar como vial público para tránsito rodado. Hay que tener en cuenta que en una ANEI está prohibido abrir nuevos caminos”.
Los ecologistas argumentan que “el atractivo del lugar es subir al Castell de Santa Àgueda por la calzada antigua, no en coche”.
En contra del aparcamiento
Los ecologistas se refieren al impacto medioambiental y paisajístico que tendría el tráfico de vehículos en Santa Àgueda, una zona de propiedad pública que permanece intacta. En este sentido, desde el GOB tampoco comparten la propuesta que plantea la Conselleria insular de Cultura de habilitar un aparcamiento próximo a la cima.
“En todo caso, el aparcamiento debería situarse a los pies de la montaña, al lado de las antiguas escuelas rurales de Santa Cecília”.
El vial se construyó dentro de un BIC y con afectación a la muralla
El último tramo de la carretera se consolidó sobre un sendero de ganado, sin que existiera ningún camino anterior, con agresiones visibles al recinto islámico
Las obras de restauración de la muralla de entrada a Santa Àgueda y la restitución del tejado de la antigua capilla empezaron el año pasado.
Inicialmente, el transporte de los materiales para los trabajos se realizó en helicóptero, hasta que se optó por construir un vial provisional para las obras, que ahí se ha quedado.
El primer tramo, desde los pies de la montaña hasta Es Pla des Born (la explanada dónde está aparcado el popular coche antiguo), se habilitó aprovechando un camino existente. Sin embargo, desde Es Pla des Born hasta la cima del recinto fortificado, se construyó una nueva infraestructura viaria sin respetar la condición de BIC del recinto y su perímetro de protección.
Según personas que llevan años estudiando Santa Àgueda, en este último tramo no había ningún camino preexistente y se ha construido aprovechando un sendero de ganado y el rastro que dejó el tractor agrícola de Santa Cecília en el año 2000. Las voces consultadas consideran que el camino es desmesurado en relación a la necesidad de las obras.
Desde Es Pla des Born se creó una carretera de 700 metros de longitud y 3 metros de anchura hasta el recinto central del castillo. El último tramo, de 300 metros de longitud, atraviesa la parte baja del recinto de Es Castellet y finaliza en el recinto central, con afectación a diversas estructuras del castillo, según las fuentes consultadas.
Estas afectaciones son: La destrucción de parte de la muralla para acceder al recinto de Es castellet; la carretera pasa por encima del muro de uno de los antiguos estanques que hay en la parte baja de Es Castellet; se destruyó parte de un tramo de muralla que separa el recinto de Es Castellet del resto y se afectó el tramo de muralla entre las dos torres del recinto central.
Además, según los investigadores, detrás de las casas de este recinto central se realizaron movimientos de tierra con excavadora, obviando que toda la cima es un yacimiento arqueológico y que el paso de maquinaria pesada puede afectar los muros.
Este periódico ha consultado a Bernat Moll, investigador y experto de la época musulmana en Menorca, quién determina que el vial construido hasta la cima de Santa Àgueda “constituye una agresión al yacimiento arqueológico”.
Considera que se trata de “una actuación irreversible en un recinto arqueológico y natural frágil”. Según los expertos consultados, la restitución del terreno a su estado original se augura complicada, teniendo en cuenta que cualquier trabajo puede causar desmoronamientos en un recinto de época islámica único más allá de Menorca por su extensión, ubicación y estado de conservación.
La ‘Martí i Bella’ alerta del peligro del deterioro si suben coches
La consellera insular de Cultura, Maruja Baíllo, afirmó que “debe ser nuestro objetivo que todos los monumentos del patrimonio insular sean lo más accesibles posible” para justificar la posible implantación de tráfico rodado en Santa Àgueda con el fin de facilitar las visitas.
Desde la Societat Històrico-Arqueològica Martí i Bella consideran que “esta aseveración no es acertada”. Esgrimen que “el objetivo no debe ser facilitar el paso a todos los monumentos de forma indiscriminada, ya que la falta de gestión, vigilancia y mantenimiento de la gran mayoría provoca que la presión humana suponga un gran y acelerado deterioro de éstos. Es preferible, según nuestro criterio, que los monumentos que puedan ser visitados estén bien gestionados a nivel de información, conservación y vigilancia. Cuantos más sean, mejor, pero en las mínimas condiciones exigibles”, explica el presidente de la SHAMB, Alberto Coll.