Andratx: el Govern formaliza la anulación de la licencia para un hotel de lujo en Biniorella |
(Diario de Mallorca, 1/02/2011)
El proyecto había sido concebido para edificar 146 habitaciones con capacidad para 294 personas
I. M. / L. G. Fin de trayecto para la iniciativa de construir un hotel de lujo en la urbanización Biniorella, en el término municipal de Andratx. La conselleria de Turismo del Govern ha dado carpetazo al asunto y ha comunicado de forma oficial que ha archivado la autorización que dio en su día, al entender que el promotor ha desistido de sus intenciones.
El establecimiento hotelero, proyectado con una categoría de cinco estrellas, fue concebido para que tuviera una capacidad de 146 unidades de alojamiento y 294 plazas.
La historia de esta infraestructura que se ha quedado en nada tuvo uno de sus primeros hitos el 23 de junio de 2006, cuando la conselleria de Turismo concedió una autorización para la construcción de un hotel en la emblemática zona de Cala Blanca, una de las pocas ventanas vírgenes abiertas al mar que quedan entre el núcleo de Camp de Mar y el Port d´Andratx.
Mientras avanzaban los trabajos de preparación de las obras –los accesos se llegaron a asfaltar–, se activó un movimiento de oposición a la construcción en que tuvo un papel muy destacada la Agrupación del PSM en el municipio.
Decisión del pleno
Las reivindicaciones de los nacionalistas no cayeron en saco roto y en diciembre de 2006 el Ayuntamiento (dirigido entonces por Jaume Porsell) adoptó por unanimidad solicitar la preservación de esta cala.
En febrero de 2007, fue el Consell quien acordó una norma cautelar para asegurar la viabilidad de la modificación del Plan Territorial para la protección de Cala Blanca. El 16 de diciembre de ese mismo año, se produjo una circunstancia insólita.
Aquel día, el PP y el PSM se unieron en una misma concentración reivindicativa para reclamar la desclasificación de todo el área urbanizable de Cala Blanca, donde se proyectaba el hotel de lujo. Pese a la coincidencia de objetivos, en un primer momento se concentraron por separado, pero al final se acabaraon uniendo en la protesta. Ya en 2009, el Decreto Ley de medidas urgentes para el impulso de la inversión en Balears dio la puntilla al proyecto.
En una notificación oficial fechada el pasado 20 de diciembre, la Conselleria arguye que no solo es que la autorización haya caducado al superar el preceptivo plazo de tres años, sino que la promotora tampoco ha presentado la documentación que era requerida tras la entrada en vigor de este decreto.
Ante esta medida puede interponerse recurso de reposición contra el departamento autonómico o bien un contencioso-administrativo.