El Consell crea una Oficina del Paisaje pero renuncia a constituir su propio servicio de disciplina urbanística |
(Diario de Ibiza, 9/03/2009)
El plan de ahorro anunciado por PSOE-ExC no impide poner en marcha un órgano destinado a «catalogar paisajes». La institución renuncia a crear su propio órgano de control de obras ilegales
EIVISSA | JOAN LLUÍS FERRER. El plan de ahorro de gastos puesto en marcha por el Consell Insular de Eivissa no será obstáculo para la creación de una Oficina del Paisaje, que dependerá de la conselleria de Política Territorial, y que tendrá como objetivo fundamental «el estudio, análisis y catalogación del paisaje de Eivissa». En cambio, el equipo de gobierno ya da por descartada la creación de su propio gabinete de disciplina urbanística para el control de obras ilegales, aunque afirma que sigue trabajando en la constitución de un consorcio insular, con la participación de los ayuntamientos, que tenga la misma finalidad. Sin embargo, todavía no hay fecha para poner en marcha este consorcio.
El secretario general de Presidencia del Consell Insular, Francesc Medina, explicó que la institución «quiere empezar a hacer política paisajística» y, para ello, la nueva oficina «estructurará un sistema de actuación para el desarrollo de políticas que pongan en valor el paisaje por su consideración estética y su valor turístico». De este modo, se emprenderán «sistemas de catalogación del paisaje», cuya función primordial será la de ser tenidos en cuenta en los procesos de elaboración de nuevas normativas urbanísticas en la isla y de futuros planes directores sectoriales. «Para salvaguardar los paisajes hace falta tener sistemas de catalogación», indicó este alto cargo, quien dijo que «progresivamente» la nueva oficina impulsará también sistemas de custodia el territorio, una figura de gestión de fincas.
Medina señaló que esta oficina estará dirigida por un funcionario de la casa y estará formado por personal ya existente en la institución: «En ningún caso habrá nuevos directores generales o cargos de confianza», declaró. De todos modos, admitió que su responsable cobrará algún complemento o plus salarial por dirigir la oficina además de seguir ejerciendo sus demás labores.
Preguntado sobre si está previsto que el Consell también cree un gabinete propio de disciplina urbanística para el control de ilegalidades, respondió: «No se prevé crearlo, porque en el Consell de Alcaldes y en el Plan de Gobierno se apuesta por tener un único ente de disciplina urbanística», que sería el Consorcio Insular de esta materia. Dicho órgano está siendo debatido con los ayuntamientos, pero muchos de ellos se oponen a formar parte del mismo.
«En Mallorca y Menorca funcionan así y es la mejor fórmula», indicó Medina, quien señaló que, de no alcanzarse un acuerdo con los ayuntamientos, «se podría tirar adelante la iniciativa sin todos los municipios». El secretario general de Presidencia afirmó, asimismo, que el Consell no se ha fijado una fecha tope para poner en marcha de este Consorcio con o sin todos los ayuntamientos. «No hay límite de tiempo», señaló.
Al parecer, la creación de este nuevo órgano forma parte de una serie de nuevas actuaciones previstas por el Plan de Gobierno 2007-2011 de la institución, realizado por una empresa privada, y que el Consell todavía no ha dado a conocer en su integridad desde que lo recibió, hace meses.
Anunciado e incumplido por Pilar Costa, Palau y TarrésEIVISSA | J. LL. F. La primera vez que el Consell Insular anunció la creación de un gabinete de disciplina urbanística propio fue bajo el mandato de Pilar Costa como presidenta y Josep Marí Ribas, Agustinet, como conseller de Urbanismo, entre 1999 y 2003. Dicho órgano iba a estar dotado de personal específico para atender y resolver denuncias de obras ilegales, y también tenía que contar con medios materiales para este fin. Sin embargo, el mandato de dicho equipo de gobierno finalizó sin que llegara a hacerse realidad este nuevo departamento.
Aunque más tímidamente y sin demasiada insistencia, el gobierno de Pere Palau (2003-2007) siguió considerando necesaria una oficina de tales características, pero nunca llegó a materializarse.
La creación de un gabinete de disciplina urbanística reapareció como objetivo prioritario al tomar posesión del cargo de presidente el progresista Xico Tarrés, en 2007, con Miquel Ramon como conseller de Urbanismo. Al parecer, la grave situación económica del Consell, así como la crisis económica general, han sido los principales motivos para ir renunciando progresivamente a este servicio. En su lugar, el Consell defiende ahora la creación de un Consorcio Insular de Disciplina Urbanística, con el acuerdo de todos los ayuntamientos, tal y como se ha hecho en Mallorca y Menorca. Sin embargo, varios consistorios municipales han expresado su oposición a esta fórmula, por lo que, diez años después de ser formulada, esta promesa sigue sin ser realidad.