Andratx: la fiscalía no pedirá de momento el ingreso en prisión de Jaume Massot |
(Diario de Mallorca, 26/11/2008)
El ex alto cargo del Govern se enfrentará en breve a una tercera acusación por el caso Andratx
FELIPE ARMENDÁRIZ/J.F.MESTRE. PALMA. La fiscalía anticorrupción ha decidido, de momento, no pedir a la Audiencia de Palma el ingreso en prisión de Jaume Massot, el ex director general de Ordenación del Territorio en el anterior Govern del Partido Popular (PP), condenado ya en dos piezas separadas del caso Andratx, la presunta trama de corrupción en torno a dicho municipio. Massot, que hasta 2003 y durante años fue el factotum del urbanismo de Andratx, se enfrentará en breve a una tercera acusación por el caso Andratx.
La fiscalía anticorrupción y la acusación particular en nombre del actual Ayuntamiento de Andratx, ejercida por los letrados Isabel Fluxà y Josep de Luis, se reunieron ayer para consensuar la estrategia tras la segunda condena contra Massot. Ambas acusaciones optaron por no instar la entrada en prisión del condenado ante la sala segunda de la Audiencia.
Jaume Massot arrastra dos penas que sumadas ascienden a ocho años y medio de privación de libertad. Su encarcelamiento se justificaría en el posible riesgo de fuga, ante la elevada condena acumulada y la posibilidad de disponer de medios económicos en el extranjero para emprender una nueva vida.
La primera condena
La primera condena fue por avalar como jefe del área municipal de Andratx la licencia para tratar de colar la construcción de un chalé en suelo rústico del entonces alcalde por el PP, Eugenio Hidalgo, como si fuera la reforma de una inexistente nave agrícola. La segunda sentencia se deriva de la ayuda que prestó a Carlos Hidalgo, hermano de Eugenio, para instalar un restaurante en una zona húmeda protegida del Port d´Andratx. Ambas condenas están recurridas ante el Tribunal Supremo
Massot pasó en 2003 desde el Ayuntamiento de Andratx a ocupar la dirección general de Ordenación del Territorio en el Govern del PP, figura como imputado en otras muchas de las casi 70 piezas separadas en que se fraccionó el sumario.
La mayoría de estas piezas guardan relación con delitos contra la ordenación del territorio por haberse edificado viviendas unifamiliares o bloques de pisos sobre fincas no urbanizables o protegidas por su riqueza medioambiental.
Massot en muchos de los expedientes informó favorablemente sobre las licencias, lo que le haría autor de delitos de prevaricación o contra la ordenación del territorio, o emitió documentos que podrían dar ser considerados falsedades.
Territorio Asesores
La tercera pieza separada de las casi 70 que conforman el caso Andratx que va a llegar a juicio oral es una relativa a Territorio Asesores, una supuesta empresa tapadera usada por Massot para camuflar trabajos particulares como arquitecto técnico de forma paralela a sus cargos como funcionario.
Esta pieza está pendiente de que la fiscalía anticorrupción y la acusación en nombre del Ayuntamiento redacten su calificación provisional. En este subcaso únicamente figura Massot como imputado y los posibles cargos contra él guardarían relación con la incompatibilidad entre su cargo y sus asesorías privadas en expedientes que posteriormente él mismo habría resuelto.
La sala segunda de la Audiencia podría, por su parte, señalar una vistilla para establecer la situación de Massot, pero no decretaría su ingreso en prisión si no es a instancia de una de las acusaciones. La vistilla podría convocarse más adelante, si las partes lo estiman oportuno.
Colaboración. La oferta para ayudar en las pesquisas sigue abierta
Aunque las ofertas que la fiscalía anticorrupción dirige a imputados en presuntas tramas de corrupción no se explicitan hasta que ambas partes llegan a un acuerdo, sí que ha trascendido que, desde hace semanas, Jaume Massot ha sido invitado a colaborar con los investigadores del caso Andratx.Este ofrecimiento seguiría en pie, en espera de que el ex alto cargo del anterior Govern del PP mueva ficha.
Las negociaciones de este tipo son asuntos muy delicados y que las partes intervinientes prefieren, por muchos motivos, llevar con extrema discreción.