(Diario de Ibiza, 21/11/2008)

Los ecologistas reclaman información a diversos organismos sobre las acciones emprendidas. Dicen que los trabajos afectan a la biodiversidad del islote

EIVISSA | P. R. El grupo ecologista GEN ha remitido escritos de denuncia a diferentes organismos para que hagan valer sus competencias y tomen medidas para devolver a su estado original el islote de Tagomago, que ha sido objeto de obras «ilegales» en los últimos meses que amenazan su biodiversidad.

El grupo se refiere concretamente a unas obras que se realizaron en la vivienda de Tagomago para que pudiera albergar una fiesta privada el pasado 18 de julio (la boda de la popular presentadora alemana Sabine Christiansen con el empresario francés Norbert Medus).

Para ello, según el GEN, se llevó a cabo el hormigonado y empedrado de caminos, se acondicionó el muelle y se instalaron plataformas y pasarelas de madera, se construyó una rampa y se vertieron al mar aguas procedentes de la desalinizadora de la isla.

Además, los ecologistas afirman que se ha construido en Tagomago una pista de aterrizaje de helicópteros que «opera de forma supuestamente ilegal» y que afecta a especies protegidas o vulnerables como el halcón marino, la pardela (virot) o el cormorán, estas dos últimas incluidas en planes de recuperación puestos en marcha por el Govern. El GEN considera que esas obras afectan igualmente a especies amenazadas como una variedad de la lagartija (sargantana).

Expediente inconcluso

Las denuncias se han remitido al Ayuntamiento de Santa Eulària, la conselleria de Medio Ambiente del Govern balear, la dirección general de Biodiversidad, la demarcación de Costas de Balears y la dirección general de Costas. El GEN pide copias de los informes emitidos e información sobre las actuaciones llevadas a cabo o en tramitación.

El alcalde de Santa Eulària, Vicent Marí, señaló ayer que no se ha resuelto aún el expediente abierto en su día contra las obras de Tagomago, que se realizó a partir de una visita que los técnicos municipales efectuaron al paraje, juntamente con los del Consell Insular.

El islote de Tagomago es un espacio protegido. Forma parte de la red Natura 2000 y es considerado Lugar de Importancia Comunitaria (LIC) y Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA).

Estas últimas fórmulas de protección fueron dictadas en su día por la Unión Europea y cualquier obra que se lleve a cabo en un enclave de estas características precisa de un estudio de evaluación del impacto ambiental y deberá ser aprobada por la Comisión Balear de Medio Ambiente.

Los promotores de las obras habían pedido licencia al Ayuntamiento de Santa Eulària, pero éste no la llegó a conceder, a la espera de los informes del resto de organismos competentes.