Andratx: Hidalgo. ´Fue una sorpresa para mí que la nave se convirtiera en una casa´ |
(Diario de Mallorca, 6/05/2008)
El ex alcalde de Andratx reconoce una infracción urbanística, aunque dice que es víctima de un complot en el ayuntamiento
J.FRANCISCO MESTRE. PALMA. Eugenio Hidalgo, ex alcalde de Andratx, quiso demostrar ayer que para él fue una sorpresa que una reforma en una nave agrícola que pretendía construir se convirtiera al final en una casa. "No buscaba un uso agrícola. El destino de la construcción era un almacén, pero sin saberlo se convirtió en una casa", llegó a decir. "Pido perdón por ello", declaró al tribunal.
El que fuera primer edil de Andratx antes de su detención afrontó ayer el primero de los más de 60 juicios que se celebrarán por las presuntas irregularidades urbanísticas cometidas en el municipio. Hidalgo compartió el banquillo con Jaume Massot, ex director general de ordenación del territorio del Govern, Jaume Gibert, celador municipal, e Ignacio Mir, letrado del ayuntamiento.
Juan Carrau, el fiscal anticorrupción, llevó el peso del interrogatorio de Hidalgo. Antes de cada pregunta el fiscal recurrió a las conversaciones telefónicas intervenidas al acusado, en las que llega a reconocer a sus interlocutores que había cometido una obra ilegal, que buscó una forma de solucionarlo, y al no poder hacerlo al final decide llevar a cabo una estrategia política para perseguir y perjudicar a los concejales de la oposición que le habían denunciado. Una estrategia que consistía en sacar del cajón los expedientes por infracciones urbanísticas que presuntamente habrían cometido estos concejales, y ello a pesar de que todos estaban prescritos. Hidalgo, muy nervioso, poco a poco fue cayendo en la trampa que le fue colocando el fiscal a cada pregunta. Fueron tantas las respuestas sin sentido, en un intento de justificar lo que difícilmente tenía explicación, que al final el alcalde tuvo que reconocer las irregularidades urbanísticas y pedir perdón por ello. Todas estas irregularidades se refieren a la casa que se construyó el ex alcalde en una finca rústica empleando una licencia que no se ajustaba a la realidad. Hidalgo quería construir en la finca, pero no sabía qué podía hacer. En el terreno había lo que se conoce como una caseta de aperos. Y para ello recurrió a Massot. "Me dijo que lo estudiaría y me aconsejó que pidiera una licencia para ampliar una nave agrícola". Hidalgo compró una finca rústica. Ocupaba una zona protegida. El fiscal mantiene que el alcalde, por ser quién era, obtuvo una licencia municipal, pero que en nada se ajustaba a lo que en realidad se construyó, que en definitiva era una casa. Tras presentar un proyecto de un ingeniero obtuvo una licencia por una nave agrícola aunque no se conozca, ni ahora ni antes, afición alguna del ex alcalde por la agricultura. Pero para evitar que sus rivales políticos pudieran atacarle con estos temas, acudió al archivo municipal en busca de expedientes urbanísticos contra los concejales. "No quería perseguir a nadie, sólo buscaba el mismo trato que el resto", insistió una y otra vez. "Todos los concejales llegaron a comer en esta casa. Todos sabían lo que había, no entiendo porqué después se sorprendieron".
El alcalde, defendido por Rafael Perera, se quiso presentar ante el tribunal como una persona que poco o nada sabía de los mecanismos internos del ayuntamiento, y sobre todo cuando se referían a las cuestiones urbanísticas, a pesar de que fue durante años el teniente de alcalde de esta área. Dijo que estaba en manos de los técnicos y de los funcionarios. "He llegado a creer que hubo una trama contra mí en el ayuntamiento de Andratx", afirmó.
Hidalgo tuvo que reconocer ayer al fiscal que al tener noticias de que un juzgado estaba investigando las presuntas irregularidades urbanísticas en su casa cambió el uso de esta vivienda. Sacó de allí cuadros, muebles y electrodomésticos, y compró sacos de pienso y alfalfa. Incluso le pidió a un amigo que le buscara un poni manso para tener en la finca. "Era para mi nieto", llegó a decir.
Curiosamente el expediente sancionador por la obra ilegal cometida por el alcalde ha desaparecido. "De eso no sé nada" dijo. Tampoco le dio mayor importancia. "Nunca le he pediría a un funcionario que me hiciera este tipo de favor, porque quedaría en sus manos", señaló. Sin embargo, no pudo dar una explicación coherente porqué dos funcionarias del Ayuntamiento, implicadas en su expediente, visitaron a su abogado antes de acudir al juzgado a declarar.