Puigpunyent: el Govern abre expediente al dueño de Son Balaguer por excavar un encinar protegido |
(El Mundo, 14/02/2007)
La Conselleria de Medio Ambiente constata 3 perforaciones - Varios vecinos dicen que el 3 diciembre ya había maquinaria - El alcalde asegura en cambio que a mediados de enero 'todo estaba en orden'
MIREYA ROURA
PUIGPUNYENT.- La empresa que ha tirado abajo la possessió de Son Balaguer, Dasdivania, no sólo ha malogrado el patrimonio histórico. También el medioambiental. La Conselleria de Medio Ambiente ha iniciado un procedimiento sancionador ya que, presuntamente, la promotora ha efectuado una gran excavación en una zona de encinar protegida según un decreto balear.
Tal y como informó la Conselleria, técnicos de la Dirección General de Biodiversidad visitaron la zona el pasado 9 de febrero y observaron nuevas construcciones, además de grandes excavaciones. Al parecer, una de ellas sobre el área protegida de encinar número 405. Ahora el Servicio Forestal debe cuantificar cuántos ejemplares han sido dañados.
Por otra parte, el acta de inspección de los técnicos recoge la existencia de pistas abiertas a través de la finca de cerca de 170 hectáreas. Cabe destacar que la possessió está enclavada en un ANEI (Área Natural de Especial Interés); por lo que cualquier actuación necesita de una declaración de interés general del Consell.
Sobre estas pistas abiertas, el Ayuntamiento de Puigpunyent respondió verbalmente a la Conselleria que había otorgado una licencia a la empresa para mejorar el camino y las marjades.
Paralelamente, el Consell Insular de Mallorca está investigando los hechos que propiciaron que un millonario extranjero derribara una possessió del siglo XIV que había comprado unos meses antes por más de mil millones de pesetas.
La licencia del siglo
Aunque la empresa Dasdivania presentó un proyecto que ya no respetaba los elementos etnológicos y patrimoniales de la alquería, el Ayuntamiento de Puigpunyent acabó concediéndole la licencia de obra. Por ella, se ingresaron en las arcas municipales cerca de 70.000 euros.
Paralelamente, el Ayuntamiento remitió el proyecto base al Consell de Mallorca; la institución que tiene la competencia en materia patrimonial.
El dictamen del Departamento de Patrimonio e Identidad Cultural del Consell advertía que la licencia sólo podía prosperar si los planos urbanísticos eran modificados sustancialmente. Prescribía que se había de mantener la fachada exterior y que no podía aumentar el volumen, entre otras cosas.
Según la versión del Ayuntamiento, esta resolución fue enviada a la empresa para que adaptara el proyecto definitivo a las prescripciones. No obstante, y en base a sus datos, Dasvidania empezó a derribar la possessió sin que hubiera obtenido la licencia definitiva.
Sobre las reacciones, la más destacable ha sido la de la Associació Milana, que el próximo sábado ha organizado una movilización.
La Conselleria de Medio Ambiente constata 3 perforaciones - Varios vecinos dicen que el 3 diciembre ya había maquinaria - El alcalde asegura en cambio que a mediados de enero 'todo estaba en orden'
MIREYA ROURA
PUIGPUNYENT.- La empresa que ha tirado abajo la possessió de Son Balaguer, Dasdivania, no sólo ha malogrado el patrimonio histórico. También el medioambiental. La Conselleria de Medio Ambiente ha iniciado un procedimiento sancionador ya que, presuntamente, la promotora ha efectuado una gran excavación en una zona de encinar protegida según un decreto balear.
Tal y como informó la Conselleria, técnicos de la Dirección General de Biodiversidad visitaron la zona el pasado 9 de febrero y observaron nuevas construcciones, además de grandes excavaciones. Al parecer, una de ellas sobre el área protegida de encinar número 405. Ahora el Servicio Forestal debe cuantificar cuántos ejemplares han sido dañados.
Por otra parte, el acta de inspección de los técnicos recoge la existencia de pistas abiertas a través de la finca de cerca de 170 hectáreas. Cabe destacar que la possessió está enclavada en un ANEI (Área Natural de Especial Interés); por lo que cualquier actuación necesita de una declaración de interés general del Consell.
Sobre estas pistas abiertas, el Ayuntamiento de Puigpunyent respondió verbalmente a la Conselleria que había otorgado una licencia a la empresa para mejorar el camino y las marjades.
Paralelamente, el Consell Insular de Mallorca está investigando los hechos que propiciaron que un millonario extranjero derribara una possessió del siglo XIV que había comprado unos meses antes por más de mil millones de pesetas.
La licencia del siglo
Aunque la empresa Dasdivania presentó un proyecto que ya no respetaba los elementos etnológicos y patrimoniales de la alquería, el Ayuntamiento de Puigpunyent acabó concediéndole la licencia de obra. Por ella, se ingresaron en las arcas municipales cerca de 70.000 euros.
Paralelamente, el Ayuntamiento remitió el proyecto base al Consell de Mallorca; la institución que tiene la competencia en materia patrimonial.
El dictamen del Departamento de Patrimonio e Identidad Cultural del Consell advertía que la licencia sólo podía prosperar si los planos urbanísticos eran modificados sustancialmente. Prescribía que se había de mantener la fachada exterior y que no podía aumentar el volumen, entre otras cosas.
Según la versión del Ayuntamiento, esta resolución fue enviada a la empresa para que adaptara el proyecto definitivo a las prescripciones. No obstante, y en base a sus datos, Dasvidania empezó a derribar la possessió sin que hubiera obtenido la licencia definitiva.
Sobre las reacciones, la más destacable ha sido la de la Associació Milana, que el próximo sábado ha organizado una movilización.
Un vídeo casero delata al alcalde
Cerca de 20 ciudadanos de Puigpunyent observaron ya el 3 de diciembre de 2006 maquinaria pesada en la possessió de Son Balaguer. Asimismo, vieron montañas de escombros y vigas de madera como claros signos de derribo. La preciada tafona, en cambio, estaba en pie. Pero dos meses más tarde ya no hay rastro de ella.
No sólo lo vieron, sino que lo dejaron grabado en un video. Esto fue el 3 de diciembre. En cambio, el alcalde de Puigpunyent, Joan Ferrà (PSOE), aseguró a este diario el 8 de febrero que el Ayuntamiento había realizado una visita de inspección hacía unos «pocos días, entre una o dos semanas atrás» sin observar nada extraño.
La versión del alcalde tampoco coincide con la de una ciudadana de Puigpunyent, quien explicó a este diario que también vio desde diciembre cambios en la possessió. Decidió advertir al Ayuntamiento sobre las extrañas obras y, según dijo, no obtuvo respuesta alguna.
Ante la negativa del Ayuntamiento a actuar, denunció los hechos al Consell. Según explicó, un inspector del Patrimonio de esta institución se presentó en Puigpunyent para verificar lo denunciado. Sin embargo, su viaje fue en vano. El Ayuntamiento lo instó a pedir una cita y lo devolvió a Palma.