 |
Andratx: Massot intervino en 264 modificaciones urbanísticas de la isla en casi cuatro años |
(Diario de Mallorca, 4/12/2006)
La dirección general de Ordenación del Territorio que gestionaba emite informes de todos los planeamientos antes de acudir al Consell
MIQUEL ADROVER. PALMA.
Jaume Massot, en su puesto de director general de Ordenación del Territorio, ha intervenido en 264 modificaciones urbanísticas que se han realizado en Mallorca en los casi cuatro años que ha estado en el Govern. La dirección general que gestionaba Massot, considerado uno de los cerebros del caso Andratx, que ha desencadenado la Operación Voramar, ha emitido informes de todas las modificaciones e iniciativas urbanísticas realizadas por los ayuntamientos.
Estos informes son necesarios antes de acudir al Consell de Mallorca para su aprobación definitiva. Los datos de las modificaciones realizadas durante estos años pertenecen a la estadística de la institución insular.
A principios de los 90, cuando el Govern pasó las competencias de urbanismo a los consells, se reservó la potestad de emitir un dictamen sobre todas las modificaciones urbanísticas que se realizasen. Esto es lo que ha venido haciendo Massot al frente de la dirección general durante estos casi cuatro años, con el apoyo de la consellera Mabel Cabrer.
El president del Govern, Jaume Matas, minimizó el jueves la labor de Massot en el Govern diciendo que sólo emitía "informes técnicos no vinculantes y desde una perspectiva no ejecutiva". Esta opinión de Matas difiere de la de expertos en urbanismo consultados, quienes coincidieron en que el peso de la dirección general de Ordenación del Territorio es importante debido a sus informes. Si bien no son vinculantes, los dictámenes que ha emitido el departamento de Massot son la opinión técnica del Govern y hay pocos casos en que se haya aprobado un nuevo planeamiento urbanístico de un municipio con el dictamen del Govern en contra.
Datos de primer nivel
Desde el despacho que la consellera Mabel Cabrer le proporcionó en la conselleria de Obras Públicas, Jaume Massot ha visto pasar por su mesa todas las recalificaciones urbanísticas, cambios de clasificaciones de suelo, nuevos planes parciales para urbanizaciones y modificaciones de toda índole urbanística así como los planes territoriales y normas insulares que presentaban los ayuntamientos y consells.
Con estos datos y expedientes, Jaume Massot, durante casi cuatro años, ha tenido en sus manos una información de primer nivel urbanístico sobre lo que pasaba con el suelo en Balears. A las modificaciones urbanísticas de Mallorca hay que unir las de Eivissa, Formentera y Menorca. En estas islas no se tienen datos tan exactos como en Mallorca, pero se habla de cerca de un centenar.
Desde el PSOE, Francesc Antich ya ha anunciado que pedirá una comisión de investigación sobre la gestión del ex director general de Mabel Cabrer. UM también está por la labor de investigarle. Jaume Matas apuntó sobre esta cuestión que se estudiará.
La dirección general de Ordenación del Territorio que gestionaba emite informes de todos los planeamientos antes de acudir al Consell
MIQUEL ADROVER. PALMA.
Jaume Massot, en su puesto de director general de Ordenación del Territorio, ha intervenido en 264 modificaciones urbanísticas que se han realizado en Mallorca en los casi cuatro años que ha estado en el Govern. La dirección general que gestionaba Massot, considerado uno de los cerebros del caso Andratx, que ha desencadenado la Operación Voramar, ha emitido informes de todas las modificaciones e iniciativas urbanísticas realizadas por los ayuntamientos.
Estos informes son necesarios antes de acudir al Consell de Mallorca para su aprobación definitiva. Los datos de las modificaciones realizadas durante estos años pertenecen a la estadística de la institución insular.
A principios de los 90, cuando el Govern pasó las competencias de urbanismo a los consells, se reservó la potestad de emitir un dictamen sobre todas las modificaciones urbanísticas que se realizasen. Esto es lo que ha venido haciendo Massot al frente de la dirección general durante estos casi cuatro años, con el apoyo de la consellera Mabel Cabrer.
El president del Govern, Jaume Matas, minimizó el jueves la labor de Massot en el Govern diciendo que sólo emitía "informes técnicos no vinculantes y desde una perspectiva no ejecutiva". Esta opinión de Matas difiere de la de expertos en urbanismo consultados, quienes coincidieron en que el peso de la dirección general de Ordenación del Territorio es importante debido a sus informes. Si bien no son vinculantes, los dictámenes que ha emitido el departamento de Massot son la opinión técnica del Govern y hay pocos casos en que se haya aprobado un nuevo planeamiento urbanístico de un municipio con el dictamen del Govern en contra.
Datos de primer nivel
Desde el despacho que la consellera Mabel Cabrer le proporcionó en la conselleria de Obras Públicas, Jaume Massot ha visto pasar por su mesa todas las recalificaciones urbanísticas, cambios de clasificaciones de suelo, nuevos planes parciales para urbanizaciones y modificaciones de toda índole urbanística así como los planes territoriales y normas insulares que presentaban los ayuntamientos y consells.
Con estos datos y expedientes, Jaume Massot, durante casi cuatro años, ha tenido en sus manos una información de primer nivel urbanístico sobre lo que pasaba con el suelo en Balears. A las modificaciones urbanísticas de Mallorca hay que unir las de Eivissa, Formentera y Menorca. En estas islas no se tienen datos tan exactos como en Mallorca, pero se habla de cerca de un centenar.
Desde el PSOE, Francesc Antich ya ha anunciado que pedirá una comisión de investigación sobre la gestión del ex director general de Mabel Cabrer. UM también está por la labor de investigarle. Jaume Matas apuntó sobre esta cuestión que se estudiará.
Los ediles del PP le hacían consultas en su despacho
Es conocido que cuando un ayuntamiento del PP tenía problemas o dudas urbanísticas acudía al despacho de Jaume Massot en la conselleria de Obras Públicas para que les aconsejara. Estas consultas eran siempre verbales y se desconoce si acudían a Massot por indicación del partido. Lo que está claro es que muchos concejales del partido conservador tenían al ya ex director general apresado por la Operación Voramar como uno de los ´gurús´ del urbanismo balear.
El caso que ha trascendido es el de Manacor, donde Massot realizó al alcalde Antoni Pastor un informe verbal sobre la polémica de los pisos de Majorica.
El ex director general emitió un informe favorable sobre la nave agrícola de Hidalgo denunciada
M.A. PALMA.
El ex director general de Ordenación del Territorio, Jaume Massot, informó favorablemente sobre el proyecto de ampliación del almacén agrícola del alcalde Eugenio Hidalgo, en el año 2003, cuando Massot era jefe de los servicios de Urbanismo del consistorio de Andratx. La citada nave agrícola ha sido denunciada por el fiscal de delitos urbanísticos ante el juzgado, imputando al detenido primer edil de Andratx los presuntos delitos de prevaricación, tráfico de influencias y contra la ordenación del territorio. Se trata de la construcción de una nave agrícola que se amplió y se reconvirtió en un chalé en suelo rústico.
El informe de Massot decía que la finalidad de la ampliación era aumentar la nave agrícola existente. Según la denuncia presentada por la oposición, se especifica que Hidalgo ha reconvertido la casa en un chalé. El informe de Massot no especificaba el uso a que se destinaba la nave agrícola del alcalde, tampoco concretaba las medidas máximas que debía tener en cuanto a volumen, altura y ocupación. El informe de Jaume Massot se emitió menos de tres meses después de que Hidalgo solicitara la licencia. El fiscal, en su denuncia, especifica la existencia del informe del ex alto cargo del Govern.
El padre de la paralizada Ley del Suelo del Govern, muy criticada por apoyar el desarrollismo
M. ADROVER. PALMA.
El Govern de Jaume Matas tuvo que paralizar la aprobación de una nueva ley del Suelo en Balears ante la avalancha de críticas sobre ella y en especial de su socio, UM, que la calificó como "ley del cemento". El padre de esta nueva normativa no era otro que el ex director general de Ordenación del Territorio, Jaume Massot. Las principales críticas vinieron de la oposición y de grupos ecologistas como el GOB.
Entre otros aspectos, la ley que redactó Massot imponía el silencio administrativo a favor del promotor. Si la administración no había contestado en dos meses, quedaba aprobado el plan parcial de las urbanizaciones, y la recepción de las mismas si en tres meses no se aprobaban. Además, desaparecían los derechos de los propietarios de suelo urbano a seguir utilizándolos como terrenos agrícolas.
Sin duda, el aspecto más polémico que introducía esta ley, que Matas se vio obligado a paralizar, era el agente urbanizador o colaborador. Esta figura podía entrar en una urbanización cuando los propietarios de terrenos incumpliesen plazos por falta de acuerdo, y acordar la expropiación sin necesidad de contar con el aval municipal para este cometido. En Valencia existe un modelo similar introducido en tiempos de Eduardo Zaplana.
Otro apartado de la ley que también muestra su apoyo a los urbanizadores y promotores es la rebaja de los porcentajes mínimos para poder desarrollar una urbanización. La normativa actual fija que para poder sacar adelante un complejo urbanístico se necesita el visto bueno del 60 por ciento de los propietarios de terrenos. Con la ley de Massot, este porcentaje se rebajaba un diez por ciento.
Legalizar urbanizaciones
El portavoz del GOB, Miquel Àngel March, destacó sobre la citada ley del Suelo elaborada por Massot y que no llegó a debatirse en el Parlament que "había muchos aspectos encaminados a legalizar urbanizaciones irregulares. Se veía que estaba hecha pensando en Andratx". Según March, uno de estos aspectos era la obligatoriedad de tener servicios, consolidando de esta forma suelo urbanos. "Estaba claro que la idea era edificar y urbanizar con esta normativa", apuntó March. Desde el GOB estaban preparando toda una serie de iniciativas contrarias a esta ley cuando fue paralizarla por el Govern.