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Pollença: un vecino denuncia una construcción "ilegal" en el camino de Llenaira |
(Última Hora, 31/10/2006, no publicada en la versió digital)
El Consistorio precintó la obra pero se continúa trabajando.
J. SAMPOL
Un vecino de Pollença, cansado de ver como se construyen casas en el municipio "en terrenos rústicos y sin permiso alguno", ha presentado una denuncia al Consistorio pollencí por "dejación de funciones", ya que se está construyendo una casa en un terreno donde, en principio, no se puede construir.
El día 23 de mayo el Ajuntament declaró ilegal dicha construcción y ordenó que se parase la obra. El 5 de julio el Consistorio precintó la construcción, pero las obras se pararon una semana y continuaron con la edificación sin hacer caso a las órdenes del Ayuntamiento. El propietario presentó unos documentos alegando que había vendido la finca y se dejó la denuncia sin efecto.
Días más tarde se volvió a precintar dicha obra y pusieron una multa al infractor de 150 euros y el doble de esta cantidad si se reincidía en el delito. "Parece de chiste", comentó éste respecto a la multa. Pero continuaron la obra.
Hace unas tres semanas el Seprona visitó la construcción y abrieron una acta. Las obras se pararon tres días y vuelta a empezar. Según el denunciante, "hay alguien que, por malicia o por llenarse los bolsillos, está destrozando Pollença".
El Consistorio precintó la obra pero se continúa trabajando.
J. SAMPOL
Un vecino de Pollença, cansado de ver como se construyen casas en el municipio "en terrenos rústicos y sin permiso alguno", ha presentado una denuncia al Consistorio pollencí por "dejación de funciones", ya que se está construyendo una casa en un terreno donde, en principio, no se puede construir.
El día 23 de mayo el Ajuntament declaró ilegal dicha construcción y ordenó que se parase la obra. El 5 de julio el Consistorio precintó la construcción, pero las obras se pararon una semana y continuaron con la edificación sin hacer caso a las órdenes del Ayuntamiento. El propietario presentó unos documentos alegando que había vendido la finca y se dejó la denuncia sin efecto.
Días más tarde se volvió a precintar dicha obra y pusieron una multa al infractor de 150 euros y el doble de esta cantidad si se reincidía en el delito. "Parece de chiste", comentó éste respecto a la multa. Pero continuaron la obra.
Hace unas tres semanas el Seprona visitó la construcción y abrieron una acta. Las obras se pararon tres días y vuelta a empezar. Según el denunciante, "hay alguien que, por malicia o por llenarse los bolsillos, está destrozando Pollença".