Santa Eulària: el Pacto denuncia que «una mano negra» movió el expediente del caso Cala Nova |
(Diario de Ibiza, 22/10/2006)
Considera que alguien agilizó la tramitación del proyecto del restaurante del primo del teniente de alcalde de Santa Eulària para que pasara por delante de otros. «Es un caso de chanchullo y comadreo», dice la oposición
EIVISSA | E. RODRÍGUEZ
El Pacto de Santa Eulària considera que tuvo que haber «una mano negra» que moviese dentro del Ayuntamiento el expediente del restaurante de Cala Nova, cuyo promotor es primo-hermano del teniente de alcalde, Vicent Riera, para que pudiese concederse la licencia de forma tan rápida. El fiscal ya habló de «una mano negra» en el juicio celebrado el miércoles pasado contra Vicent Riera y la ex arquitecta municipal, a los que se imputa un presunto delito de prevaricación por la concesión de esta licencia.
El portavoz del Pacto de Santa Eulària, Carlos Salinas, insistió ayer en rueda de prensa que la licencia, en contra de lo manifestado por la defensa de Vicent Riera y el promotor del restaurante, se concedió en sólo tres días. «Se solicitó la licencia formalmente el día 25 y el 28 la Comisión de Gobierno aprobaba su concesión», explicó Salinas, quien, no obstante, apuntó que el expediente entró en el Ayuntamiento unos meses antes (en marzo). Salinas considera que «si no hubo una persona que cogiese el expediente y lo llevase a cada departamento (en edificios distintos incluso) no pudo tramitarse tan rápido».
En este sentido, apuntó que en esa época (año 2000) se discutía si el Plan de Delimitación de Suelo Urbano (PDSU), que era el instrumento de planificación que se utilizaba para conceder licencias, era legal o no y que la tramitación de un expediente tardaba al menos un año. «El proyecto del restaurante de Cala Nova pasó por delante de muchos otros expedientes que debían llevar meses esperando. Se trata de un claro caso de chanchullo y comadreo. No sé si Vicent Riera se lleva bien o mal con su primo, pero tuvo que haber una mano que llevase el expediente de un sitio a otro para que pasase delante de otros», reiteró. Salinas considera que no sólo Riera debería estar imputado, sino «toda la Comisión de Gobierno que votó a favor de la licencia».
Por otra parte, el Pacto criticó que las Normas Subsidiarias provisionales aprobadas por el Consell para desbloquear la situación urbanística de Santa Eulària declarasen urbana la zona del restaurante (en el planeamiento anterior era reserva urbana) en detrimento de otras. «Hay lugares también calificados como reserva urbana con hasta 15 construcciones que no pasan a ser urbanas», dijo Salinas, que reconoció que la parcela donde se construyó el restaurante dispone de un acceso rodado y servicios, pero que también los tiene la colindante, donde actualmente hay un camping fuera de ordenación. «¿Por qué la zona del camping, que es a donde conduce la calle, no es urbana? Se trata de otro claro ejemplo de favoritismo», subrayó.
Considera que alguien agilizó la tramitación del proyecto del restaurante del primo del teniente de alcalde de Santa Eulària para que pasara por delante de otros. «Es un caso de chanchullo y comadreo», dice la oposición
EIVISSA | E. RODRÍGUEZ
El Pacto de Santa Eulària considera que tuvo que haber «una mano negra» que moviese dentro del Ayuntamiento el expediente del restaurante de Cala Nova, cuyo promotor es primo-hermano del teniente de alcalde, Vicent Riera, para que pudiese concederse la licencia de forma tan rápida. El fiscal ya habló de «una mano negra» en el juicio celebrado el miércoles pasado contra Vicent Riera y la ex arquitecta municipal, a los que se imputa un presunto delito de prevaricación por la concesión de esta licencia.
El portavoz del Pacto de Santa Eulària, Carlos Salinas, insistió ayer en rueda de prensa que la licencia, en contra de lo manifestado por la defensa de Vicent Riera y el promotor del restaurante, se concedió en sólo tres días. «Se solicitó la licencia formalmente el día 25 y el 28 la Comisión de Gobierno aprobaba su concesión», explicó Salinas, quien, no obstante, apuntó que el expediente entró en el Ayuntamiento unos meses antes (en marzo). Salinas considera que «si no hubo una persona que cogiese el expediente y lo llevase a cada departamento (en edificios distintos incluso) no pudo tramitarse tan rápido».
En este sentido, apuntó que en esa época (año 2000) se discutía si el Plan de Delimitación de Suelo Urbano (PDSU), que era el instrumento de planificación que se utilizaba para conceder licencias, era legal o no y que la tramitación de un expediente tardaba al menos un año. «El proyecto del restaurante de Cala Nova pasó por delante de muchos otros expedientes que debían llevar meses esperando. Se trata de un claro caso de chanchullo y comadreo. No sé si Vicent Riera se lleva bien o mal con su primo, pero tuvo que haber una mano que llevase el expediente de un sitio a otro para que pasase delante de otros», reiteró. Salinas considera que no sólo Riera debería estar imputado, sino «toda la Comisión de Gobierno que votó a favor de la licencia».
Por otra parte, el Pacto criticó que las Normas Subsidiarias provisionales aprobadas por el Consell para desbloquear la situación urbanística de Santa Eulària declarasen urbana la zona del restaurante (en el planeamiento anterior era reserva urbana) en detrimento de otras. «Hay lugares también calificados como reserva urbana con hasta 15 construcciones que no pasan a ser urbanas», dijo Salinas, que reconoció que la parcela donde se construyó el restaurante dispone de un acceso rodado y servicios, pero que también los tiene la colindante, donde actualmente hay un camping fuera de ordenación. «¿Por qué la zona del camping, que es a donde conduce la calle, no es urbana? Se trata de otro claro ejemplo de favoritismo», subrayó.
«Vicent Riera debería irse a su casa»
EIVISSA | E. R.
El portavoz del Pacto de Santa Eulària, Carlos Salinas, señaló que a tenor de la declaración del teniente de alcalde, Vicent Riera, en respuesta a las preguntas del Ministerio Fiscal y a la jueza del Juzgado de lo Penal número 1, se pone de manifiesto cómo funciona la gestión urbanística del Ayuntamiento, en especial la concesión de licencias. «Si los concejales no pintan nada, ¿quién manda en la Comisión de Gobierno? No sabemos si manda el alcalde o el técnico que redacta los informes» indicó.
Vicent Riera aseguró en el juicio del miércoles que fue «un error» votar a favor de la licencia del restaurante de su primo, pero que lo hizo porque no lo sabía. La jueza cuestionó a Riera «qué pintan los concejales» y «si acuden a las comisiones sólo a cobrar». También le preguntó si alguien tenía conocimientos de lo que votaban en las comisiones, a lo que Riera contestó que «nadie nos forma para ser políticos». «Qué suerte», le dijo acto seguido la jueza, «porque los demás necesitamos muchos años para formarnos». El teniente de alcalde dijo que la entendía, pero que «aunque le extrañe la Comisión de Gobierno funciona así».
El portavoz de la oposición señaló que cuando sus compañeros acuden a un pleno previamente revisan los expedientes. «El señor Riera debería irse a su casa porque tiene dedicación exclusiva en el Ayuntamiento. ¿Para qué está?», cuestionó. Salinas indicó que obviamente los políticos deben fiarse de los técnicos, «pero no hasta el punto de no mirar nada». El teniente de alcalde explicó ante la jueza que en las comisiones de gobierno el secretario de la Corporación lee en dos líneas el número de expediente y si cuentan o no con informes favorables, y que con esta información se vota. «El Ayuntamiento y el PP quedan en muy mal lugar», agregó Salinas.