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Sant Josep informa de que ya no se va a instalar una hormigonera |
(Diario de Ibiza, 26/07/2006)
El alcalde asegura a a los vecinos de Sant Jordi que la constructora de la autovía sólo fabricará moldes de hormigón con material transportado desde Montecristo. El Govern declina recurrir la paralización judicial
EIVISSA | EUGENIO RODRÍGUEZ
El Ayuntamiento de Sant Josep asegura que la constructora de la autovía del aeropuerto ya no piensa levantar en Sant Jordi una planta de suelo-grava-cemento (hormigonera) y una dosificadora de áridos en la calle Els Avets, en Sant Jordi, junto a Ca na Palleva y que, en realidad, la plataforma que se está levantando en la zona servirá para fabricar los moldes de hormigón que se utilizan para forrar las paredes de la trinchera. Así al menos lo explicó ayer el alcalde, José Serra Escandell, a una representación de la Asociación de Vecinos Olimpo en una reunión que mantuvieron en su despacho.
El alcalde aseguró que la constructora le informó el viernes de que en Sant Jordi no se iba a construir ninguna planta de hormigón y que la instalación para la elaboración de prefabricados (los moldes de hormigón) sólo se utilizará durante un periodo de dos meses. Según el alcalde, la constructora transportará el hormigón en camiones desde la planta de Montecristo hasta la instalación de Sant Jordi, donde se fabricarán los bloques.
Serra Escandell ha pedido a la constructora que le informe por escrito de qué tipo de instalación se está construyendo. Asimismo, el primer edil de Sant Josep ha solicitado un informe a la conselleria de Salud y Consumo del Govern balear de los posibles efectos de la fábrica móvil. Las obras de construcción de esta instalación fueron paralizadas el viernes por orden judicial a la espera de que una prueba pericial determine los posibles efectos nocivos sobre la salud de la población. Según ha podido saber este periódico, la conselleria de Obras Públicas se ha personado en la instrucción del caso, pero ha declinado presentar un recurso de reforma a la orden de paralización cautelar.
Se da la circunstancia de que la Comisión balear de Medio Ambiente informó favorablemente a la construcción de una planta de suelo-grava-cemento y una dosificadora de áridos en Sant Josep, dentro del «perímetro de restricciones moderadas de un pozo que abastece Can Bossa», y que el teniente de alcalde, José Torres, Tumàs, votó en contra en representación del Ayuntamiento. El BOIB publicó este acuerdo el pasado 22 de junio. Entonces, no se hacía referencia alguna a la instalación de una plataforma para elaborar prefabricados de obra. Asimismo, la constructora, según los vecinos, desmontó el sábado, un día después de la paralización, la dosificadora de áridos.
Los vecinos que se reunieron ayer con el alcalde expresaron su decepción porque esperaban otra respuesta por parte del Ayuntamiento, más aún cuando en una reunión anterior, que tuvo lugar el viernes pasado, la concejala de Bienestar Social, Encarna Castro, les informó de que el Consistorio estaba en contra de que estas instalaciones se ubiquen en una zona tan próxima a un núcleo urbano. «Hay que ver realmente si esta instalación no es contaminante», dice una de las vecinas, al tiempo que apunta que seguramente «provocará mucho más ruido». Por ello, la Asociación de Vecinos Olimpo asegura que seguirá adelante en su lucha para forzar el desmantelamiento de las estructuras.
El alcalde entiende que los vecinos «no estén satisfechos», pero apunta que parte del problema se ha resuelto: «Mejorará mucho el estado de Platja d´en Bossa porque no habrá polvo». Avanzó que tampoco exigirán licencia al amparo de los informes del Govern. Pidió paciencia a los vecinos porque cualquier obra genera molestias.
El alcalde asegura a a los vecinos de Sant Jordi que la constructora de la autovía sólo fabricará moldes de hormigón con material transportado desde Montecristo. El Govern declina recurrir la paralización judicial
EIVISSA | EUGENIO RODRÍGUEZ
El Ayuntamiento de Sant Josep asegura que la constructora de la autovía del aeropuerto ya no piensa levantar en Sant Jordi una planta de suelo-grava-cemento (hormigonera) y una dosificadora de áridos en la calle Els Avets, en Sant Jordi, junto a Ca na Palleva y que, en realidad, la plataforma que se está levantando en la zona servirá para fabricar los moldes de hormigón que se utilizan para forrar las paredes de la trinchera. Así al menos lo explicó ayer el alcalde, José Serra Escandell, a una representación de la Asociación de Vecinos Olimpo en una reunión que mantuvieron en su despacho.
El alcalde aseguró que la constructora le informó el viernes de que en Sant Jordi no se iba a construir ninguna planta de hormigón y que la instalación para la elaboración de prefabricados (los moldes de hormigón) sólo se utilizará durante un periodo de dos meses. Según el alcalde, la constructora transportará el hormigón en camiones desde la planta de Montecristo hasta la instalación de Sant Jordi, donde se fabricarán los bloques.
Serra Escandell ha pedido a la constructora que le informe por escrito de qué tipo de instalación se está construyendo. Asimismo, el primer edil de Sant Josep ha solicitado un informe a la conselleria de Salud y Consumo del Govern balear de los posibles efectos de la fábrica móvil. Las obras de construcción de esta instalación fueron paralizadas el viernes por orden judicial a la espera de que una prueba pericial determine los posibles efectos nocivos sobre la salud de la población. Según ha podido saber este periódico, la conselleria de Obras Públicas se ha personado en la instrucción del caso, pero ha declinado presentar un recurso de reforma a la orden de paralización cautelar.
Se da la circunstancia de que la Comisión balear de Medio Ambiente informó favorablemente a la construcción de una planta de suelo-grava-cemento y una dosificadora de áridos en Sant Josep, dentro del «perímetro de restricciones moderadas de un pozo que abastece Can Bossa», y que el teniente de alcalde, José Torres, Tumàs, votó en contra en representación del Ayuntamiento. El BOIB publicó este acuerdo el pasado 22 de junio. Entonces, no se hacía referencia alguna a la instalación de una plataforma para elaborar prefabricados de obra. Asimismo, la constructora, según los vecinos, desmontó el sábado, un día después de la paralización, la dosificadora de áridos.
Los vecinos que se reunieron ayer con el alcalde expresaron su decepción porque esperaban otra respuesta por parte del Ayuntamiento, más aún cuando en una reunión anterior, que tuvo lugar el viernes pasado, la concejala de Bienestar Social, Encarna Castro, les informó de que el Consistorio estaba en contra de que estas instalaciones se ubiquen en una zona tan próxima a un núcleo urbano. «Hay que ver realmente si esta instalación no es contaminante», dice una de las vecinas, al tiempo que apunta que seguramente «provocará mucho más ruido». Por ello, la Asociación de Vecinos Olimpo asegura que seguirá adelante en su lucha para forzar el desmantelamiento de las estructuras.
El alcalde entiende que los vecinos «no estén satisfechos», pero apunta que parte del problema se ha resuelto: «Mejorará mucho el estado de Platja d´en Bossa porque no habrá polvo». Avanzó que tampoco exigirán licencia al amparo de los informes del Govern. Pidió paciencia a los vecinos porque cualquier obra genera molestias.