Alaró: el Ayuntamiento desafecta 12 metros de vía pública para regularizar una finca de pisos |
(Diario de Mallorca, 10/12/2005)
Pide 19.000 euros a cambio de ceder al promotor una franja de calle
BARTOMEU NOGUERA. ALARÓ.
El equipo de gobierno (PSOE-UM) ha decidido solucionar el conflicto abierto con el promotor de un edificio de viviendas de la calle Pere Rosselló i Oliver, proponiéndole que abone 19.000 euros a cambio de los 11,70 metros cuadrados de vía pública que, según los informes técnicos, ha ocupado de forma irregular. De esta manera el consistorio se compromete a dar el final de obra a esta promoción de Construccions Alaró que hace meses está a la espera de obtener la autorización administrativa.
La resolución municipal considera probado que el edificio de doce viviendas que se levanta en la esquina de las calles Pere Rosselló y Son Amengual ocupa una franja de 10,59 metros cuadrados de dominio público de la primera vía, y 1,11 de la segunda. Dado que, según los informes, esta ocupación no impide el tránsito de vehículos, se ha optado por desafectar, rechazando así la opción de la demolición al considerar que en este caso esta medida "no se ajusta al principio de proporcionalidad".
Con esta resolución el consistorio también responde a la denuncia efectuada por otro constructor del municipio contra este edificio el pasado mes de junio. En el escrito, este empresario denunciaba que el edificio incumplía la alineación, solicitando la paralización de las obras y que se obligara al promotor a restablecer el vial a sus dimensiones originales.
Para el alcalde de Alaró, Miquel Deyà (PSOE), "lo que tendría que haber hecho el anterior gobierno municipal era esto mismo: desafectar estos terrenos que ocupaba la obra. Quiero recordar que lo que se hizo en 2002 fue firmar un documento en el que el edil de Urbanismo -Joan Simonet, del PP-, el técnico municipal y la dirección técnica de la obra aceptaban como correcta la nueva alineación del edificio. Es decir, regalaban una franja de dominio público".
Deyà explica que su objetivo es "dar soluciones a los problemas que nos surgen y a los que nos vienen de anteriores gobiernos, como es este caso, y por esto pensamos que ésta es la mejor solución". El primer edil defiende que "no sería normal ordenar la demolición", y añade que "sólo por esto el constructor ya podría estar contento". En cuanto al precio de la valoración, Deyà asegura que se han basado en los informes del aparejador en los que se tiene en cuenta la superficie y el provecho que se le ha dado.
Pide 19.000 euros a cambio de ceder al promotor una franja de calle
BARTOMEU NOGUERA. ALARÓ.
El equipo de gobierno (PSOE-UM) ha decidido solucionar el conflicto abierto con el promotor de un edificio de viviendas de la calle Pere Rosselló i Oliver, proponiéndole que abone 19.000 euros a cambio de los 11,70 metros cuadrados de vía pública que, según los informes técnicos, ha ocupado de forma irregular. De esta manera el consistorio se compromete a dar el final de obra a esta promoción de Construccions Alaró que hace meses está a la espera de obtener la autorización administrativa.
La resolución municipal considera probado que el edificio de doce viviendas que se levanta en la esquina de las calles Pere Rosselló y Son Amengual ocupa una franja de 10,59 metros cuadrados de dominio público de la primera vía, y 1,11 de la segunda. Dado que, según los informes, esta ocupación no impide el tránsito de vehículos, se ha optado por desafectar, rechazando así la opción de la demolición al considerar que en este caso esta medida "no se ajusta al principio de proporcionalidad".
Con esta resolución el consistorio también responde a la denuncia efectuada por otro constructor del municipio contra este edificio el pasado mes de junio. En el escrito, este empresario denunciaba que el edificio incumplía la alineación, solicitando la paralización de las obras y que se obligara al promotor a restablecer el vial a sus dimensiones originales.
Para el alcalde de Alaró, Miquel Deyà (PSOE), "lo que tendría que haber hecho el anterior gobierno municipal era esto mismo: desafectar estos terrenos que ocupaba la obra. Quiero recordar que lo que se hizo en 2002 fue firmar un documento en el que el edil de Urbanismo -Joan Simonet, del PP-, el técnico municipal y la dirección técnica de la obra aceptaban como correcta la nueva alineación del edificio. Es decir, regalaban una franja de dominio público".
Deyà explica que su objetivo es "dar soluciones a los problemas que nos surgen y a los que nos vienen de anteriores gobiernos, como es este caso, y por esto pensamos que ésta es la mejor solución". El primer edil defiende que "no sería normal ordenar la demolición", y añade que "sólo por esto el constructor ya podría estar contento". En cuanto al precio de la valoración, Deyà asegura que se han basado en los informes del aparejador en los que se tiene en cuenta la superficie y el provecho que se le ha dado.
Un informe municipal de 2002 fijó la nueva alineación
Una de las curiosidades de la tramitación de este asunto surgió el pasado mes de junio, cuando apareció en el expediente un documento fechado en julio de 2002 sin sello de registro de entrada en el que el entonces edil de Urbanismo y los técnicos dejaban constancia escrita de que existía una invasión de hasta 35 centímetros de la vía pública, y añadían que esta sería a partir de aquel momento la nueva alineación correcta. En base a este documento prosiguió la construcción del edificio.