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Calvià: Delgado para a Cursach la piscina ilegal de 1.500 m 2 que está construyendo en el Western Park |
(El Mundo, 29/05/2005)
El empresario de ocio crea una nueva atracción en su parque acuático con un permiso para cambiar la jardinería - Hasta que el Consell no varíe el Plan General, los terrenos donde ha hecho la 'megaexcavación' sólo pueden albergar «viviendas unifamiliares»
ESTEBAN URREIZTIETA
PALMA.- El Western Watern Park de Cursach vuelve a ser noticia. El parque acuático del mayor empresario de ocio de Baleares, cuya construcción fue autorizada por Margarita Nájera en una zona residencial unifamiliar de Calvià y que fue objeto de una de las denuncias interpuestas contra su antecesora por el alcalde Carlos Delgado, vuelve a estar en obras. Y Cursach, cuando construye, no se conforma con cualquier cosa.
En esta ocasión, está edificando una piscina de olas de 1.481,20 metros cuadrados que tiene previsto poner en marcha este mismo verano. Todo ello en una zona que, tal y como sigue contemplando el Plan General de Ordenación Urbana de Calvià está destinada única y exclusivamente a la construcción de viviendas unifamiliares.
Pero las irregularidades del nuevo Megaproyecto no terminan ahí. Para llevar a cabo la gigantesca excavación, Cursach solicitó una licencia de obra menor. Puso como pretexto que iba a «restituir el césped, el pavimento y el vallado». El Ayuntamiento de Calvià se lo creyó y se la concedió. Y a la vista de lo creado, acaba de decretar la paralización inmediata de las obras.
La autorización le fue dada por el Consistorio calvianer al ex máximo accionista del Real Mallorca el pasado 9 de febrero de 2005 mediante un decreto de Alcaldía que firmó de su puño y letra el teniente de alcalde de Urbanismo, Alberto León. Y el edil dio luz verde convencido de que, efectivamente, lo que iba a hacer allí Cursach era arreglar el césped, el pavimento y las vallas. Nada más.
Con este salvoconducto legal, Bartolomé Cursach puso en marcha su maquinaria y llenó el Western Park de excavadoras y de albañiles que han trabajado día y noche para ponerlo todo a punto. En tan sólo tres meses ha conseguido tener terminada una de las mayores piscinas de Baleares, cuyo principal atractivo será que simulará el efecto de las olas en el mar. Una atracción con la que cuentan ya otros parques acuáticos españoles y de la que hasta el momento carecía el de Cursach.
El parque acuático fue denunciado por el primer edil de Calvià ante el fiscal jefe de Baleares el 30 de septiembre de 2002 al ver cómo Margarita Nájera daba permiso a Cursach para construir «cinco toboganes, un río lento, nuevas taquillas de acceso, una nave prefabricada, baños nuevos y ampliaba la plataforma de los toboganes».
Viviendas y no toboganes
Y en unos terrenos donde «no está previsto el uso recreativo o turístico del terreno, y únicamente el residencial unifamiliar». El caso fue finalmente archivado por el juzgado de instrucción y el PP lo recurrió el pasado mes de febrero al considerar que el juez ha utilizado como pretexto una norma caducada. La formación política que lidera en Calvià Carlos Delgado interpuso un recurso de reforma -se denomina así el que se interpone contra el mismo juez- contra el auto dictado el 25 de enero que decretaba el sobreseimiento provisional y el archivo de las diligencias del caso. Los populares sostienen que la instrucción debe continuar «al haberse vulnerado el artículo 17 de la Ley del Suelo». Sin embargo, el juez, siguiendo la solicitud del fiscal, Juan Carrau, ha optado por dar carpetazo a este asunto.
El PP recuerda además que este fue el motivo que llevó al Colegio de Arquitectos a denegar el visado. Y aún así, se acabó otorgando la licencia al proyecto de la arquitecta Isabel Nájera, hermana de la que por aquel entonces era la alcaldesa del municipio. Los populares de Calvià, a través del abogado Luis Rodríguez Ramos argumentan que «la fundamentación jurídica del fiscal, aceptada por el juez, se basa en la jurisprudencia interpretativa de una norma anterior a la vigencia del artículo 17 de la Ley del Suelo».
Y recuerdan que «en dicha normativa, y pese a ser restrictiva para la concesión de este tipo de licencias, cabía una interpretación generosa que amaparaba situaciones conflictivas o complejas». «Sin embargo», prosigue el recurso del PP, «con la claridad y nitidez de la prohibición de la norma aplicable en el presente caso -artículo 17 de la Ley del Suelo- no cabe ninguna duda de que se infringió, a sabiendas de ello, y se cometió una supuesta prevaricación».
En este sentido, apuntan que «en las declaraciones de los implicados, que constan en las diligencias, se admitía la vulneración del artículo 17 de la Ley del Suelo». Por los motivos expuestos, esta formación política considera «errónea» la decisión de archivo provisional y adopta la postura de recurrir con el objeto de que el magistrado «reconsidere su postura». Y apostillan que «contra la presunta desestimación del recurso de reforma, cabe interponer un recurso de apelación».
El empresario de ocio crea una nueva atracción en su parque acuático con un permiso para cambiar la jardinería - Hasta que el Consell no varíe el Plan General, los terrenos donde ha hecho la 'megaexcavación' sólo pueden albergar «viviendas unifamiliares»
ESTEBAN URREIZTIETA
PALMA.- El Western Watern Park de Cursach vuelve a ser noticia. El parque acuático del mayor empresario de ocio de Baleares, cuya construcción fue autorizada por Margarita Nájera en una zona residencial unifamiliar de Calvià y que fue objeto de una de las denuncias interpuestas contra su antecesora por el alcalde Carlos Delgado, vuelve a estar en obras. Y Cursach, cuando construye, no se conforma con cualquier cosa.
En esta ocasión, está edificando una piscina de olas de 1.481,20 metros cuadrados que tiene previsto poner en marcha este mismo verano. Todo ello en una zona que, tal y como sigue contemplando el Plan General de Ordenación Urbana de Calvià está destinada única y exclusivamente a la construcción de viviendas unifamiliares.
Pero las irregularidades del nuevo Megaproyecto no terminan ahí. Para llevar a cabo la gigantesca excavación, Cursach solicitó una licencia de obra menor. Puso como pretexto que iba a «restituir el césped, el pavimento y el vallado». El Ayuntamiento de Calvià se lo creyó y se la concedió. Y a la vista de lo creado, acaba de decretar la paralización inmediata de las obras.
La autorización le fue dada por el Consistorio calvianer al ex máximo accionista del Real Mallorca el pasado 9 de febrero de 2005 mediante un decreto de Alcaldía que firmó de su puño y letra el teniente de alcalde de Urbanismo, Alberto León. Y el edil dio luz verde convencido de que, efectivamente, lo que iba a hacer allí Cursach era arreglar el césped, el pavimento y las vallas. Nada más.
Con este salvoconducto legal, Bartolomé Cursach puso en marcha su maquinaria y llenó el Western Park de excavadoras y de albañiles que han trabajado día y noche para ponerlo todo a punto. En tan sólo tres meses ha conseguido tener terminada una de las mayores piscinas de Baleares, cuyo principal atractivo será que simulará el efecto de las olas en el mar. Una atracción con la que cuentan ya otros parques acuáticos españoles y de la que hasta el momento carecía el de Cursach.
El parque acuático fue denunciado por el primer edil de Calvià ante el fiscal jefe de Baleares el 30 de septiembre de 2002 al ver cómo Margarita Nájera daba permiso a Cursach para construir «cinco toboganes, un río lento, nuevas taquillas de acceso, una nave prefabricada, baños nuevos y ampliaba la plataforma de los toboganes».
Viviendas y no toboganes
Y en unos terrenos donde «no está previsto el uso recreativo o turístico del terreno, y únicamente el residencial unifamiliar». El caso fue finalmente archivado por el juzgado de instrucción y el PP lo recurrió el pasado mes de febrero al considerar que el juez ha utilizado como pretexto una norma caducada. La formación política que lidera en Calvià Carlos Delgado interpuso un recurso de reforma -se denomina así el que se interpone contra el mismo juez- contra el auto dictado el 25 de enero que decretaba el sobreseimiento provisional y el archivo de las diligencias del caso. Los populares sostienen que la instrucción debe continuar «al haberse vulnerado el artículo 17 de la Ley del Suelo». Sin embargo, el juez, siguiendo la solicitud del fiscal, Juan Carrau, ha optado por dar carpetazo a este asunto.
El PP recuerda además que este fue el motivo que llevó al Colegio de Arquitectos a denegar el visado. Y aún así, se acabó otorgando la licencia al proyecto de la arquitecta Isabel Nájera, hermana de la que por aquel entonces era la alcaldesa del municipio. Los populares de Calvià, a través del abogado Luis Rodríguez Ramos argumentan que «la fundamentación jurídica del fiscal, aceptada por el juez, se basa en la jurisprudencia interpretativa de una norma anterior a la vigencia del artículo 17 de la Ley del Suelo».
Y recuerdan que «en dicha normativa, y pese a ser restrictiva para la concesión de este tipo de licencias, cabía una interpretación generosa que amaparaba situaciones conflictivas o complejas». «Sin embargo», prosigue el recurso del PP, «con la claridad y nitidez de la prohibición de la norma aplicable en el presente caso -artículo 17 de la Ley del Suelo- no cabe ninguna duda de que se infringió, a sabiendas de ello, y se cometió una supuesta prevaricación».
En este sentido, apuntan que «en las declaraciones de los implicados, que constan en las diligencias, se admitía la vulneración del artículo 17 de la Ley del Suelo». Por los motivos expuestos, esta formación política considera «errónea» la decisión de archivo provisional y adopta la postura de recurrir con el objeto de que el magistrado «reconsidere su postura». Y apostillan que «contra la presunta desestimación del recurso de reforma, cabe interponer un recurso de apelación».