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Binissalem: una vecina denuncia las molestias que provoca una carpintería ilegal
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(Última Hora, 4/05/2005)
Asegura que el Ajuntament «se lava las manos»
CARME MORENO
Una vecina de Binissalem ha denunciado a Ultima Horalas molestias que le provoca una carpintería ilegal que se encuentra situada en suelo rústico sin disponer de los permisos necesarios ni del interés general para desarrollar esta actividad. Hace cinco años que la familia de Josefina Riera intenta con impotencia resolver este caso que ha llegado incluso hasta los juzgados.
Así Josefina Riera, ha interpuesto un recurso contencioso administrativo contra «la inactividad del Ajuntament de Binissalem», que en ningún momento «nos han aclarado las cosas ya que el alcalde, Miquel Nadal, nos dice que lo arreglará pero hace nada». «Hemos llegado a recibir insultos por vía telefónica por parte del excelentísimo alcalde de Binissalem por preguntar y querer saber cómo estaba el tema», dijo Josefina Riera.
La familia Riera, que tiene una casa de campo junto a la fábrica ilegal se queja de los ruidos y la suciedad que padecen: «Queman serrín junto a nuestra casa; muy a menudo barnizan y nos llega un olor insoportable y las noches y los festivos también trabajan», explicó Riera. Así, señalan que tanto el Consell de Mallorca como el Ajuntament le han denegado al propietario de la empresa los permisos para realizar esta actividad en suelo rústico.
Asegura que el Ajuntament «se lava las manos»
CARME MORENO
Una vecina de Binissalem ha denunciado a Ultima Horalas molestias que le provoca una carpintería ilegal que se encuentra situada en suelo rústico sin disponer de los permisos necesarios ni del interés general para desarrollar esta actividad. Hace cinco años que la familia de Josefina Riera intenta con impotencia resolver este caso que ha llegado incluso hasta los juzgados.
Así Josefina Riera, ha interpuesto un recurso contencioso administrativo contra «la inactividad del Ajuntament de Binissalem», que en ningún momento «nos han aclarado las cosas ya que el alcalde, Miquel Nadal, nos dice que lo arreglará pero hace nada». «Hemos llegado a recibir insultos por vía telefónica por parte del excelentísimo alcalde de Binissalem por preguntar y querer saber cómo estaba el tema», dijo Josefina Riera.
La familia Riera, que tiene una casa de campo junto a la fábrica ilegal se queja de los ruidos y la suciedad que padecen: «Queman serrín junto a nuestra casa; muy a menudo barnizan y nos llega un olor insoportable y las noches y los festivos también trabajan», explicó Riera. Así, señalan que tanto el Consell de Mallorca como el Ajuntament le han denegado al propietario de la empresa los permisos para realizar esta actividad en suelo rústico.