Selva: el alcalde ordena una inspección al aserradero atendiendo quejas vecinales |
Los afectados expusieron una amplia batería de "irregularidades" de la empresa ante el pleno
PEP CÓRCOLES. SELVA.
Joan Rotger (PP), alcalde de Selva, prometió a los vecinos del aserradero Bajoket (carretera Selva-Inca) que mandaría al aparejador municipal para que inspeccionase el lugar y "observe si se cumplen las condiciones de la licencia de construcción y traslado".
Los vecinos acudieron al pleno celebrado el martes pasado y al finalizar la sesión presentaron una batería de quejas ante la corporación. Las quejas incidieron también en "la nula actuación del Ayuntamiento". Catalina Amengual aseguro a Rotger: "Yo le llamé por teléfono y usted no quiso hablar conmigo. El funcionario me dijo que si quería que pusiera una denuncia y así lo hice el 9 de septiembre. Usted aún no me ha contestado".
Los afectados se quejaron de diferentes molestias. Mencionaron la existencia de montones de serrín al aire libre que "cuando sopla viento es esparcido a las fincas de alrededor". Insistieron también en el ruido producido por la industria, pues "carece de ventanas". Además de ello denunciaron que "trabaja desde las seis de la mañana hasta las 22 horas de forma habitual e incluso los días de fiesta".
De la discusión se esclareció que el aserradero no dispone de final de obras y por tanto no tiene licencia de actividades. Rotger aseguró que estaba tramitándose. Los vecinos requirieron el paro de la actividad por molestias derivadas de que la obra no está finalizada ajustandose a lo requerido en el proyecto. Los vecinos dijeron al alcalde que acudirían al juzgado si no tomaba cartas en el asunto".
Uno de los afectados manifestó que "después de meses de lucha hemos quedado una docena que seguiremos insistiendo. El resto están acobardados porque les han dicho que sus casas son ilegales y tienen miedo. Un chalé ilegal no perjudica al vecino, pero esta empresa es molesta".