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Sant Josep anula la licencia que otorgó en Cala Molí al reconocer que infringe la LEN |
(Diario de Ibiza, 15/10/2005)
Finalmente, el Ayuntamiento de Sant Josep ha admitido que otorgó una licencia ilegal para 30 apartamentos en una zona de la Ley de Espacios Naturales (LEN), tal y como habían denunciado previamente los ecologistas del GEN. Pese a haber defendido inicialmente la plena legalidad de las obras, el Ayuntamiento acaba de suspender formalmente los efectos de la licencia que otorgó a la promotora Grupo Medi, de modo que los trabajos no podrán continuar y quedan definitivamente paralizados. Los ecologistas ya habían llevado el caso ante la Fiscalía de Eivissa y ayer se felicitaron por la decisión municipal.
sant josep | joan lluís ferrer
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Sant Josep ha decidido suspender los efectos de la licencia que otorgó en Cala Molí para la construcción de 30 apartamentos detrás de la promoción recientemente terminada, tras reconocer que dicha autorización vulnera la Ley de Espacios Naturales (LEN). Los ecologistas denunciaron este hecho a finales del mes de agosto y pidieron la paralización de las obras, pero el Ayuntamiento aseguró entonces que el GEN se equivocaba y rechazó sus denuncias.
La decisión adoptada por el equipo de gobierno se ha producido como consecuencia de un informe técnico suscrito por el aparejador municipal, que concluye que, efectivamente, la zona donde se iban a construir estos 30 apartamentos está clasificada como Área Natural de Especial Interés (ANEI) por la Ley de Espacios Naturales (LEN), por lo que dicho proyecto no es viable ni podía otorgarse en este lugar licencia alguna.
Además de anular su propia licencia, el Ayuntamiento ha decidido remitir el expediente al juzgado de lo Contencioso Administrativo de Palma de Mallorca para que haga efectiva la suspensión judicial del permiso, tal y como establece el procedimiento previsto para estos casos.
Los promotores de esta urbanización, el Grupo Medi de Valencia, tendrán a partir de ahora un plazo para la presentación de las correspondientes alegaciones, que serán analizadas por el Ayuntamiento antes de hacer firme la anulación del permiso.
A pesar de la defensa inicial que de la licencia hizo el equipo de gobierno en un primer momento, posteriormente, el 7 de septiembre, decidió paralizar de forma cautelar las obras tras comprobar que probablemente podían estar invadiendo la ANEI que limita con la urbanización construida anteriormente. Al propio tiempo, se encargó un nuevo informe topográfico y otras pruebas para terminar de aclarar la ilegalidad denunciada.
Las gestiones en el Ayuntamiento se agilizaron notablemente coincidiendo con la presentación, por parte del GEN, de una denuncia contra la Corporación ante la Fiscalía de Eivissa.
La promotora acató la paralización inicialmente decretada por el Ayuntamiento, aunque expresó su confianza de que ésta no se demorara excesivamente y que «todo se arregle» para poder reanudar los trabajos.
Finalmente, el Ayuntamiento de Sant Josep ha admitido que otorgó una licencia ilegal para 30 apartamentos en una zona de la Ley de Espacios Naturales (LEN), tal y como habían denunciado previamente los ecologistas del GEN. Pese a haber defendido inicialmente la plena legalidad de las obras, el Ayuntamiento acaba de suspender formalmente los efectos de la licencia que otorgó a la promotora Grupo Medi, de modo que los trabajos no podrán continuar y quedan definitivamente paralizados. Los ecologistas ya habían llevado el caso ante la Fiscalía de Eivissa y ayer se felicitaron por la decisión municipal.
sant josep | joan lluís ferrer
La Junta de Gobierno del Ayuntamiento de Sant Josep ha decidido suspender los efectos de la licencia que otorgó en Cala Molí para la construcción de 30 apartamentos detrás de la promoción recientemente terminada, tras reconocer que dicha autorización vulnera la Ley de Espacios Naturales (LEN). Los ecologistas denunciaron este hecho a finales del mes de agosto y pidieron la paralización de las obras, pero el Ayuntamiento aseguró entonces que el GEN se equivocaba y rechazó sus denuncias.
La decisión adoptada por el equipo de gobierno se ha producido como consecuencia de un informe técnico suscrito por el aparejador municipal, que concluye que, efectivamente, la zona donde se iban a construir estos 30 apartamentos está clasificada como Área Natural de Especial Interés (ANEI) por la Ley de Espacios Naturales (LEN), por lo que dicho proyecto no es viable ni podía otorgarse en este lugar licencia alguna.
Además de anular su propia licencia, el Ayuntamiento ha decidido remitir el expediente al juzgado de lo Contencioso Administrativo de Palma de Mallorca para que haga efectiva la suspensión judicial del permiso, tal y como establece el procedimiento previsto para estos casos.
Los promotores de esta urbanización, el Grupo Medi de Valencia, tendrán a partir de ahora un plazo para la presentación de las correspondientes alegaciones, que serán analizadas por el Ayuntamiento antes de hacer firme la anulación del permiso.
A pesar de la defensa inicial que de la licencia hizo el equipo de gobierno en un primer momento, posteriormente, el 7 de septiembre, decidió paralizar de forma cautelar las obras tras comprobar que probablemente podían estar invadiendo la ANEI que limita con la urbanización construida anteriormente. Al propio tiempo, se encargó un nuevo informe topográfico y otras pruebas para terminar de aclarar la ilegalidad denunciada.
Las gestiones en el Ayuntamiento se agilizaron notablemente coincidiendo con la presentación, por parte del GEN, de una denuncia contra la Corporación ante la Fiscalía de Eivissa.
La promotora acató la paralización inicialmente decretada por el Ayuntamiento, aunque expresó su confianza de que ésta no se demorara excesivamente y que «todo se arregle» para poder reanudar los trabajos.
«Eran conscientes de su ilegalidad»
El portavoz del Grup d'Estudis de la Naturalesa (GEN), Mariano Marí, valoró ayer positivamente la decisión de anular la licencia que este grupo había denunciado y opinó que «el miedo a las consecuencias de una conducta tan ilegal como esta ha hecho reflexionar al Ayuntamiento». Marí señaló que la medida «debería haber llegado mucho antes, porque los desmontes de más de 20 metros de altura que se han hecho causan un impacto brutal». En su opinión, el Ayuntamiento «permitió la continuación de estas obras siendo consciente de su ilegalidad, pero tenía la esperanza de que nadie se diera cuenta». El GEN exigirá ahora que «se derribe todo lo que se ha construido de forma ilegal, que se restituya la zona a su estado natural y se depuren responsabilidades».